Sergio Checo Pérez ya es subcampeón de la Fórmula 1 después de un año de locura con Red Bull, ya que de ser contendiente, terminó con el riesgo de perder el segundo lugar en la clasificación del Mundial de Pilotos.
Checo aceptó que existió una “crisis real” que se junto con la presión de los medios y el entorno del deporte motor, algo que los hizo tener desconfianza justo desde el Gran Premio de Barcelona.
“Sin duda ha sido muy duro, más que nada mantenernos enfocados en lo que teníamos que hacer. Cuando se está en Red Bull había demasiado ruido externo que a veces complica mucho el poderte enfocar. Hay una presión mediática que no la tiene ningún otro equipo”, dijo.
“Más allá de eso, nuestra crisis fue real. Yo creo que después de Barcelona o en Barcelona me encontraba con un auto que era el más dominante de la historia, pero era muy difícil encontrar la puesta a punto, poderlo maximizar los fines de semana, a la vez los demás equipos mejoraban muchísimo y la desconfianza crecía de nuestro lado”, dijo en entrevista a DAZN.