Un triunfo ante El Salvador le dará a la Selección Mexicana su octava asistencia al hilo a un Mundial. También un empate, combinado con igualada o derrota de Costa Rica ante Estados Unidos, e incluso un revés les daría la clasificación.
Así, parece que sólo es cuestión de finiquitar el trámite. El equipo tricolor ya hace maletas para Qatar 2022; sin embargo, la pregunta es ¿con quién lo hará como director técnico?
Y es que el problema en su retina del ojo derecho, por el cual fue operado nuevamente, aunado al evidente bajo rendimiento del equipo nacional, son motivos para que los altos jerarcas del futbol mexicano analicen la continuidad del argentino tras la clasificación.
“Al parecer, el “Tata” Martino tiene algunas probabilidades de salir del equipo mexicano, después de lo que pase contra El Salvador, que no va a ser otra cosa que una victoria (…) ya hay rumores y presiones muy fuertes para que no continue. Primero, por cuestiones de salud y, segundo, porque el equipo mexicano no ha convencido”, afirma Raúl Pérez, colaborador de Reporte Índigo.
Asimismo, Pérez recuerda: “no será la primera vez que un técnico que clasifica al Mundial no llegue a la magna justa. Ya pasó en 1998 con Bora (Milutinovic), ya pasó en 2014 con el “Chepo” (José Manuel de la Torre) y (Víctor Manuel) Vucetich. Yo creo que Miguel Herrera está listo”.
Y es justamente Herrera, actualmente DT de Tigres, quien el pasado lunes comenzó su “campaña” para volver a la Selección Mexicana al afirmar: “Nos brinca porque no va a los partidos por cuestión de salud, si no la tiene, se tendría que hacer a un lado”.
Asimismo, el “Piojo” destacó que el esquema táctico del “Tata” no ha sido para nada eficiente y eso fue notorio ante Honduras, la peor defensa del Octagonal. “Para mí, la adaptación a ese 4-3-3 no ha sido la mejor, no se adaptan.
“Arrancaron muy bien, pero sabemos que la eliminatoria es larga, desgastante, corres muchas circunstancias que no ves en los amistosos”, agregó Herrera, quien llegó al Tri para afrontar el repechaje de cara al Mundial de Brasil 2014 y salió en julio de 2015 tras una malograda Copa Oro y el conflicto que se suscitó con Christian Martinoli.
“Sinceramente mi cabeza está al 100 por ciento en Tigres, (pero) también lo he dicho, nunca le voy a decir que no a la Selección”, declaró Miguel cuando se le preguntó si volvería al Tri.
Pero, ¿por qué hay quienes piden la salida de Martino? Aquí algunos de los argumentos de los que se valen sus críticos:
Después de liderar buena parte del Octagonal de Concacaf, llegaron aquellas visitas a Estados Unidos y Canadá, en noviembre pasado, en las que México cayó como visitante y de esta manera fue relegado al tercer lugar de la eliminatoria y así no se puede reclamar el mote de “Gigante de Concacaf”.
Asimismo, ante el país de las “Barras y Estrellas” ya se acumulan cuatro juegos sin victoria, tres de ellos fueron derrota y dos en finales de torneos de Concacaf (Copa Oro 2021 y Nations League).
Y si bien, el boleto a Qatar, todo indica, se conseguirá de manera directa, el equipo de Martino carece de poder ofensivo, pues en los últimos cuatro enfrentamientos en eliminatoria, sólo se registran dos anotaciones.
Ya sobre el partido ante los salvadoreños, la misión para no llegar al repechaje es evitar una derrota abultada. México tiene una diferencia de +7, en contraste al +3 de Costa Rica. Si los tricolores pierden por diferencia de un tanto, los ticos deberían superar por cuatro goles a los estadounidenses.
El Azteca dejó de pesar para la Selección Mexicana
En años anteriores, se diría que la mesa está puesta para un triunfo holgado, pero en la actualidad, esta Selección Mexicana fue más productiva fuera del Estadio Azteca.
El Tri del “Tata” sólo ha ganado tres de los seis encuentros jugados hasta ahora en el “Coloso de Santa Úrsula” y apenas 12 de los 25 puntos que acumula fueron como local.
Hirving Lozano causó polémica tras afirmar en una entrevista con TUDN que “la verdad, sí nos afecta (jugar en el Azteca) un poco a los que venimos de Europa y se siente y se ve porque no somos los mismos”.
En el pasado, los 2 mil 240 metros sobre el nivel del mar de la Ciudad de México y el jugar a mediodía afectaban más a los rivales que a la Selección, integrada casi exclusivamente por jugadores de la liga local, acostumbrados a esas condiciones.
Ahora, en los últimos dos partidos, Martino mandó de arranque al campo a siete de 11 jugadores que están fuera del país.
Sin embargo, hoy todo esa queda lado. El triunfo ante un rival que ya no pelea nada es obligación. Después, vendrá la preparación intensa para Qatar… con Martino o sin él.
