Salario base para deportistas, ‘gol’ hacia la igualdad

Luego de meses de análisis y discusión, en las que se tomó la opinión de ligas, empresas, deportistas y organizaciones feministas, finalmente, la igualdad salarial en el deporte está cerca de “anotar” con el salario base.

El martes pasado, por unanimidad, el Senado de la República aprobó reformas a la Ley Federal del Trabajo (LFT), las cuales, establecen un salario base para mujeres y hombres deportistas, así como el respeto pleno a los derechos laborales de las primeras.

“Aplica para todas las ligas que tienen el mote de profesional y que contratan a personas para ser parte de la estructura del espectáculo. Todas las ligas tendrán que generar sus propuestas y mecanismos para establecer cuál es el salario base, en conjunto con instancias de la Secretaría del Trabajo, que van a buscar no ser una carga excesiva para el desarrollo de las propias industrias del deporte”, se lee en el dictamen.

De esta manera, no solo la Liga MX femenil será regulada, sino otras como la Liga Mexicana de Softbol (LMS) y la Liga Nacional de Baloncesto Profesional Femenil (LNBP Femenil).

Asimismo, esta iniciativa contempla a futbolistas, boxeadoras, luchadoras y deportistas de otras disciplinas, las cuales tampoco podrán ser discriminadas ni hostigadas.

Eso sí, la reforma no significa que en el deporte profesional hombres y mujeres ganen lo mismo, sino que haya una remuneración inicial homologada para ambos, independientemente del nivel de competencia o competitividad.

“El objetivo era establecer un salario base para todas las personas deportistas profesionales y de ahí en adelante será el nivel de entretenimiento, competitividad y el mercado los que establezcan las diferencias. Lo que no podíamos permitir era que hubiera un salario base distinto para trabajos iguales”, declaró la senadora Patricia Mercado, una de las impulsoras de la iniciativa.

En noviembre pasado, luego de que se le dio primera lectura al dictamen, la presidenta de la Liga MX, Mariana Gutiérrez, envió una carta a los legisladores en la cual argumentó que la igualdad de salarios tendría un costo anual de 273 millones de pesos, lo que representaba un incremento de 43 por ciento respecto de la cifra anual del Clausura 2023 (191 millones).

Ante ello, puso en duda la viabilidad de la liga femenil y declaró que las jugadoras tenían un salario mínimo actual de 35 mil pesos.

Esta última cifra contrastó con las recabadas por los legisladores. Napoleón Gómez Urrutia, presidente de la Comisión de Trabajo y Seguridad Social, declaró que “en el caso del futbol, la liga mexicana de varones percibe en promedio, mensualmente, 643 mil pesos; el salario mensual de una jugadora de la misma liga es de tres mil 700”.

Asimismo, una de cada dos jugadoras no recibe salario fijo y 9 de cada 10 finalizará su carrera antes de los 20 años por la baja remuneración.

Finalmente, el martes se acordaron los cambios a la reforma que pasó en el pleno con 79 votos a favor. Ahora, llegará a la Cámara de Diputados para su discusión, aprobación y publicación en el Diario Oficial de la Federación.

Una vez promulgada la reforma, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, en un plazo no mayor de 180 días naturales, fijará el salario base de las personas deportistas profesionales mediante un diálogo en el que incluirá a las federaciones y agrupaciones respectivas.

Dicho salario también se fijará en coordinación con el Instituto Nacional de las Mujeres, la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos y el Sistema Nacional de Cultura Física y Deporte.

Les darán seguridad social

Con esta reforma, las empresas o dueños de los equipos estarán obligados a incorporar a las y los deportistas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), así como mantener un seguro médico privado, especializado en el deporte que se practique.

Asimismo, los equipos femeniles de cualquier liga profesional deberán hacer registro, ante su federación correspondiente, de sus protocolos de atención para casos de violencia de género, hostigamiento y acoso laboral.

“El segundo gran objetivo era promover y obligar a las ligas, sobre todo a las femeniles, a establecer protocolos contra el acoso y la violencia. Estamos dando 180 días a las ligas y a las organizaciones para registrar sus protocolos” dijo el martes pasado Patricia Mercado, de Movimiento Ciudadano.

Vale decir que en la Liga MX femenil, fundada en diciembre 2016, se han presentado varios casos de acoso o violencia de género a jugadoras por parte de elementos del cuerpo técnico o en redes sociales.

Uno de los casos más sonados fue el de Scarlett Camberos, quien dejó en marzo de 2023 al América femenil por sufrir violencia digital.

Asimismo, en diciembre pasado, el Necaxa femenil aceptó la renuncia del técnico Jorge Gómez, quien fue señalado de presunto acoso sexual y pedir “favores” a las futbolistas a cambio de ser titulares. En noviembre, el entrenador ya había sido acusado de comentarios misóginos.

Finalmente, la reforma estipula un día de descanso obligatorio con goce de sueldo para las y los deportistas. Bien merecido.