Russell Wilson explica que su trabajo como quarterback corría peligro hace dos meses, luego de la mejor victoria de los Broncos de Denver en la NFL.
Fue entonces, durante la semana libre posterior al triunfo sobre los Chiefs de Kansas City el 29 de octubre, que Wilson se topó con un ultimátum del equipo, según contó él mismo: Ajustar el contrato o correr riesgo de quedarse sentado.
Un Wilson decepcionado conversó el viernes con los medios luego de la práctica, por primera vez desde que fue degradado en la semana por el entrenador en jefe Sean Payton. Se le relegó al rol de suplente por Jarrett Stidham para el domingo ante los Chargers de Los Ángeles (5-10).
Wilson estaba perplejo por el momento en que se le envió a la banca, ya que los Broncos (7-8) todavía tienen posibilidades de entrar a la postemporada, aunque éstas sean escasas.
Pero las señales de alerta estaban ahí. Poco después de ayudar a que Denver terminara una racha de 16 reveses ante los Chiefs, campeones defensores del Super Bowl se le habría hecho un planteamiento acerca de la estructura de su contrato.
El dolor
Wilson firmó una extensión contractual por cinco años, valorada en 245 millones de dólares el año pasado, la cual entraría en rigor la próxima temporada.
“Esto duele definitivamente. Por momentos fue un golpe bajo”, dijo Wilson acerca de las discusiones que ocurrieron en medio de la racha de cinco triunfos de Denver. “Vine acá por una razón, y es para ganar más campeonatos. Ese sigue siendo mi enfoque hasta hoy. Estoy bajo contrato. Quiero hacer lo que sea posible. Y es lo que haré de la manera correcta”.
Fue difícil para él olvidarse de aquel episodio sobre su contrato. Guió al equipo hacia victorias ante Búfalo, Minnesota, y Cleveland para escalar en la ruta hacia la postemporada. Pero luego los Broncos cayeron en un bache, perdiendo en tres de sus últimos cuatro compromisos.
Necesitan ganar los partidos que restan y que los Chiefs pierdan sus últimos dos juegos para llegar a los playoffs por primera vez desde que ganaron el Super Bowl en la temporada 2015.
Choque con la prensa
Wilson evitó una pregunta sobre si había algo que pudiera hacer con su acuerdo para posiblemente facilitar su continuidad con los Broncos.
“Mi enfoque esta semana consiste en tratar de ser el mejor compañero de equipo que pueda ser”, dijo Wilson. “Eso es de lo que me he dado cuenta durante todo este proceso. Sólo debo enfocarme en esta semana. Concentrarme en el mejor compañero de equipo que pueda ser”.
Se mostró evasivo sobre las cláusulas del contrato relacionadas con su estado de salud, dada la constante amenaza de lesiones. Ha sido capturado en 45 ocasiones esta temporada, y 55 en la anterior.
“Sé que cada vez que piso el terreno hay contacto físico”, dijo Wilson, quien ha lanzado para un total de 3.070 yardas, junto con 26 pases de touchdown y ocho intercepciones esta campaña. “Nunca he sido timorato al jugar, nunca he jugado con miedo. Esa ha sido la manera en que siempre he jugado”.
Payton dijo que no estaba al tanto de las discusiones que se habrían llevado a cabo por la directiva y el gerente general George Paton, cuando se le preguntó sobre la situación contractual que involucraba a Wilson, nueve veces elegido al Pro Bowl.
“Es una dura decisión”, dijo Payton, quien cumplió 60 años el viernes. “A mí, en el lugar en que me encuentro en mi carrera, lo único que me interesa es obtener otra victoria. No existen otras razones. Russ tuvo una gran semana. Lo manejó profesionalmente bien”.
Sobre el futuro de Wilson, Payton dijo que tiene planeado evaluar la operación en su totalidad al concluir la temporada antes de tomar cualquier decisión.