Del nido a la máquina: Ricardo Peláez se niega a salir del Estadio Azteca
Cruz Azul regresa al Estadio Azteca y lo harán de la mano de Ricardo Peláez, jugador y directivo con pasado americanista que buscará acabar con la sequía de títulos de la Máquina Celeste
Indigo StaffLuego de varias semanas en las que los rumores eran fuertes, al fin se confirmó que ex delantero de la Selección Mexicana y del Club América, Ricardo Peláez, llegó a un arreglo con la directiva de Cruz Azul para ocupar la dirección deportiva del equipo.
El anuncio lo hizo oficial la directiva celeste la noche del lunes y se sabe que Peláez, quien también fue director deportivo del América, comenzará a trabajar a partir de esta semana. La intención es que el regreso de la Máquina Celeste al Estadio Azteca, así como la llegada de su refuerzo en la directiva, ayude a que el Cruz Azul supere el palmares que consiguió de la Torre, quien sólo logró clasificar al equipo a la liguilla una sola vez, en cinco torneos.
Hasta el lunes 7 de mayo, el director deportivo del Cruz Azul era Eduardo “Yayo” de la Torre, a quien la directiva del equipo dio las gracias y decidió no renovar su contrato con la institución, según se informó en un comunicado.
“Le agradecemos la entrega y profesionalismo que siempre mostró el señor Eduardo de la Torre Menchaca durante el tiempo que estuvo en la institución como director deportivo. Le deseamos éxito tanto en lo personal como en lo profesional en sus futuros proyectos”, se lee en el texto.
Peláez Linares sería presentado este miércoles en las instalaciones de La Noria para comenzar a trabajar en el aspecto administrativo.
Durante su gestión en el América, Ricardo Peláez conquistó dos títulos de liga y dos de la Liga de Campeones de la Concacaf y en la Máquina Cementera esperan que aporte su trabajo para terminar con una sequía de 20 años sin títulos en su regreso al estadio Azteca, mismo escenario en el que Peláez consiguió la mayoría de sus triunfos como futbolista y como directivo.
PODRÍA INTERESARTE: CRUZ AZUL, AL BORDE DEL COLAPSO