En febrero pasado, la tenista Renata Zarazúa disfrutó de ser la de casa en el Abierto de Acapulco, donde el público se desbordó en apoyo hacia ella, pese a caer en la semifinal con la canadiense Leylah Fernandez, y la semana pasada en Roland Garros, pese a que no hubo gente en las tribunas ella se imaginó a la multitud apoyándola.
Renata avanzó a segunda ronda, en la que perdió en tres sets ante la ucraniana Elina Svitolina, tercera del mundo, un hecho histórico para el tenis mexicano, que ha visto solo a tres mujeres nacionales en esa fase de Roland Garros.
Pese a estos éxitos, Renata reconoce que el camino para poder mantenerse en este deporte ha sido complicado, toda vez que difícilmente alguien que se encuentre fuera de los mejores 100 del ranking de la WTA puede vivir de jugar profesionalmente.
“Cuando estás en los Grand Slams (Top 100) es mucho dinero, en un año sabes que puede vivir económicamente perfectamente, o sea que participas en todos, puedes vivir tranquilamente del tenis, pero si no estás en esos torneos tienes que viajar a torneos donde no tienes todo pagado, y le tienes que pagar a tu entrenador o a tu fisio. Siempre lo he dicho, que para que puedas vivir del tenis tienes que estar dentro del top 100, antes de eso tienes que buscar cómo vivir”, indicó Renata en teleconferencia.
Para aspirar a mejores torneos, la mexicana tuvo que dejar de participar en certámenes de muy bajo perfil, pero eso representó una mayor exigencia, para lo cual fue fundamental empezar a trabajar con su hermano.
Desde Angélica Gavaldón, en la década de los 90, el tenis femenil mexicano no ha tenido a una representante que destaque, puesto que quiere ocupar Renata. Por lo pronto, su actuación en Roland Garros la puso en la conversación en redes sociales, y aún en la lejanía, ella sintió el apoyo de su afición.
“Me imaginaba que México estaba viendo un partido de futbol y que gritaban y todo, así me imaginaba cuando me dijeron que se hablaba mucho de mí aquí, y no hay nadie como la afición mexicana que viven con pasión cuando uno de los suyos triunfa, creo que ningún país tiene esa pasión como los mexicanos”, resaltó.
Pese a las dificultades por la emergencia sanitaria mundial, Renata Zarazúa indicó que ahora su meta está en el Abierto de Australia, el primer torneo Major de cada año, para seguir su ascenso en el ranking.
