Los Mariners de Seattle han adquirido al estelar jardinero cubano Randy Arozarena en un cambio desde los Rays de Tampa Bay, informó este viernes el equipo.
Para hacerse con los servicios de Arozarena, los Mariners enviaron a los Rays al jardinero Aidan Smith y al lanzador derecho Brody Hopkins, ambos jugadores de liga menor, indicó el conjunto en un comunicado.
Con la adquisición de Arozarena, los Marineros buscan inyectar energía a su alineación, ante la cerrada batalla que desarrollan con los Astros de Houston, en la lucha por el primer lugar de la División Oeste de la Liga Americana de cara a la postemporada.
Arozarena es un bate derecho, que puede inyectar poder de extrabase y velocidad a una alineación que cuenta con jugadores de características similares, como el dominicano Julio Rodríguez y el torpedero J. P. Crawford, ambos en lista de lesionados.
El movimiento también le asegura a los Mariners tener el control sobre Arozarena, quien está en medio de su segundo año de arbitraje salarial, lo que posiblemente pudo ser uno de los factores que empujaron su salida de los Rays, ya que para el próximo año deberá recibir un aumento considerable en su salario, que este año es de 8.1 millones de dólares.
Mudanza a Seattle
Esta experiencia de cambiar de equipo no es nueva para Arozarena, quien fue enviado desde los Cardenales de San Luis a los Rays antes del inicio de la temporada del año 2020, y por los resultados que mostró al llegar a Tampa Bay, donde se convirtió en la principal figura del equipo, al cual llevó a la Serie Mundial del 2020, siendo el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana, parece adaptarse rápido a estas situaciones.
La reputación que ha forjado el Novato del Año de la Liga Americana en 2021 de responder de manera efectiva ante las situaciones de presión en el juego es uno de los factores clave en este movimiento, ya que al llegar a este viernes los Marineros (53-51) se encuentra a apenas un juego de desventaja con relación a los Astros (53-49).
Sin embargo, vienen de perder ocho de sus últimos 10 partidos, incluyendo una barrida de tres juegos ante Los Angels, en la que su ofensiva apenas anotó tres carreras.
El jardinero cubano tuvo un inicio de campaña difícil, llegando a batear para apenas .158 al finalizar mayo, pero desde entonces ha acumulado un promedio de bateo de .284 , con siete cuadrangulares, amasando un llamativo porcentaje de embasarse de .397, lo que refleja la frecuencia con la que ha logrado mantenerse en los senderos, contribuyendo con 18 remolcadas y 20 carreras anotada.
En general, Arozarena batea para .211 con 15 jonrones, con 37 vueltas empujadas y 45 anotadas en lo que va de campaña.
