La cantidad de partidos pospuestos en la Liga Premier inglesa subió a nueve en una semana tras el aplazamiento este jueves de cinco encuentros a consecuencia del COVID-19.
Una serie de casos en Leicester provocó que su partido contra Tottenham fuera pospuesto apenas horas antes de su silbatazo inicial. El brote que afecta al plantel del Manchester United también tuvo como consecuencia que el duelo del sábado como visitante ante Brighton no se pueda disputar.
Protect yourself and others by following public health guidance when heading to a #PL match:
Wear a face covering where required 😷
Get your COVID pass ready on the NHS app 📱
Regularly wash your hands 🧼
Maintain social distancing 📏 pic.twitter.com/qWPu8XtQq5— Premier League (@premierleague) December 16, 2021
Además de la postergación del Manchester United-Brighton el sábado, la liga inglesa anunció el aplazamientos de los siguientes duelos: Southampton-Brentford, Watford-Crystal Palace, West Ham-Norwich (todos el sábado) y Everton-Leicester (domingo).
Varios casos de COVID-19 en Brentford le impidieron recibir al United el martes, en tanto que los choques Brighton vs Tottenham y Burnley vs Watford también fueron aplazados, reflejando el agravamiento de la situación sanitaria en Gran Bretaña al propagarse la variante Ómicron.
Las dos últimos partidos postergados se anunciaron luego que el técnico de Brentford, Thomas Frank, había solicitado el aplazamiento de la jornada del fin de semana para que los clubes puedan lidiar con los brotes de coronavirus.
En plena rueda de prensa el jueves, previo a la visita de Brentford a Southampton el sábado, Frank recibió la notificación de cuatro casos adicionales de coronavirus en el plantel y personal. Ello elevó a 13 la cantidad de casos.
Lee también: Brote de COVID-19 en el Manchester United; cerraron lugar de entrenamiento por 24 horas
Mermado por un brote en sus propias filas, un pedido previo de Leicester de postergar su partido contra Tottenham había sido rechazado por la Liga Premier.
Pero la liga inglesa señaló el jueves que Leicester había quedado con una “cantidad insuficiente de jugadores disponible” tras confirmarse nuevas infecciones de COVID-19 en el personal y la plantilla de jugadores. Sus instalaciones de entrenamiento fueron cerradas para contener el brote.
“La Liga Premier entiende que esta decisión decepcionará y frustrará a los aficionados que tenían previsto acudir al partido esta noche y disculpas por el inconveniente y la perturbación causada súbitamente”, dijo la liga.