Patriots enfrentan un presente difícil lejos de la élite
Tras vivir años dorados, los Patriots enfrentan una nueva realidad alejados de la élite. Este año, tampoco luce viable que lleguen a Playoffs ; se medirán contra Brady
Francisco SánchezUna temporada bastó para “ubicarse”. Mientras Tom Brady celebró la obtención de su séptimo anillo Super Bowl, New England Patriots (7-9) tuvo su primer récord perdedor en 20 años. Sí, desde la temporada 2000, cuando registraron 5-11, los “Pats” no tenían una campaña tan mala. Y parece que este año las cosas no van a cambiar mucho.
El tener al genio Bill Belichick como entrenador en jefe no fue suficiente para sacar a flote a un equipo que marcó una dinastía en los últimos años, que se erigió como el invitado más frecuente al Super Bowl, con 11 apariciones, y que se convirtió en un fenómeno de popularidad en México y el mundo.
Tom Brady llevó a este equipo a lo más alto de la Liga, los hizo ser el rival más odiado, pero en 2020 tuvieron un duro golpe de realidad y para esta temporada apenas tienen dos juegos estelares, es decir, en Domingo o Lunes por la Noche. Esto era algo impensable en otras épocas.
Uno de ellos será, justamente, ante su exquarterback. Los Patriots recibirán al campeón Tampa Bay en la Semana 4. Será el regreso del “hijo pródigo”, al cual, extrañaron de sobremanera la campaña pasada.
Cam Newton no pudo llenar ni a la mitad los zapatos del “G.O.A.T” (es misión imposible para la mayoría de quarterbacks de la NFL) y condujo al abismo a una ofensiva que antes estaba en los primeros planos.
El ataque de New England fue el número 27 de la Liga, con un promedio de 20.4 puntos por encuentro y fue la defensiva la que evitó una caída más estrepitosa.
Ante ello, y a unos días del Kickoff de la campaña regular, Newton no ha sido nombrado como quarterback titular, por lo que su lugar podría ser tomado por el novato Mac Jones.
“No lo tomaré personal. Solo quiero que ustedes lo entiendan. Ustedes lo saben y yo lo sé”, dijo el expasador de los Carolina Panthers el lunes al diario Boston Globe.
Para mejorar el ataque, Patriots firmó dos alas cerradas con mucho dinero por separado: Jonnu Smith y Hunter Henry , que deben responder rápido.
En cuanto a la defensiva, Belichick es un especialista y lo comprobó. Con muy poco, logró que este departamento de los “Pats” fuera el ocho de la NFL con 22.1 puntos por partido; sin embargo, para 2021, el reto será mayor.
El calendario para el equipo de Boston aumentó en complejidad y de entrada se enfrentarán al menos con cinco equipos pronosticados para tener 10 victorias.
Además de Tampa Bay, se enfrentarán a Cleveland, Indianapolis, Nueva Orleans, Tennessee y dos veces a los Bills, sus rivales divisionales. Todos ellos jugaron Playoffs el año pasado.
Patriots resentirán el adiós de Edelman
Tras la salida de Brady, Julian Edelman se quedó en 2020 como símbolo del equipo; sin embargo, en abril pasado dio un paso al costado debido a la lesión en una de sus rodillas, que sólo le permitió ver acción en seis juegos de la campaña anterior.
El receptor tomó la decisión, luego de que los Patriots lo cortaran tras una prueba física fallida, pese a tener contrato hasta este año.
Además, el retiro de Patrick Chung, así como la partida de Jason McCourty y Joe Thuney harán más complicado que New England abandone el sitio de medianía en el que cayó.
Para intentarlo, sumaron al receptor Nelson Agholor, así como a los defensivos Henry Anderson, Matthew Judon y Kyle Van Noy, quien vuelve tras pasar un año con los Miami Dolphins.
En el Draft, se destacaron las adiciones del ya mencionado Mac Jones, así como del tackle defensivo Christian Barmore (Alabama) y Ronnie Perkins, un corredor de pases sobresaliente.
Así, los “Pats” buscan volver a la élite; sin embargo, Bills y Dolphins, sus rivales en el Este de la Conferencia Americana, serán los primeros obstáculos que deberán sortear, algo que luce complicado.