La gente del poblado de Great Torrington, en el occidente de Inglaterra salió a las calles para ver el recorrido de la Antorcha Olímpica, pero se toparon con una sorpresa.
La flama que simboliza el espíritu del deporte se extinguió durante unos momentos mientras viajaba en la silla de ruedas del jugador paralímpico de bádminton, David Follett.
El Comité Organizador de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Londres 2012 explicó que la llama se apagó por un problema de funcionamiento de la hornilla.
Indigo Staff