Matthew Stafford recibió esta semana una llamada de un amigo de la infancia, quien sabe algo acerca de las esperas largas para ganar un título deportivo, en especial en la NFL.
Clayton Kershaw buscará estar el domingo 13 de febrero en el SoFi Stadium, donde Stafford guiará el ataque de los Los Ángeles Rams (15-5) en busca de disipar una maldición igual a la que Kershaw exorcizó en 2020, cuando se coronó al fin con los Dodgers de la misma ciudad en el béisbol.
“Él está emocionado por mí, algo que agradezco. No hablamos mucho de cómo es esto ni de qué esperar. Su trabajo es muy distinto al mío, pero simplemente está emocionado”, dijo Stafford con una sonrisa.
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— Los Angeles Rams (@RamsNFL) January 14, 2022
Kershaw y Stafford crecieron juntos en el área metropolitana de Dallas y asistieron a la secundaria Highland Park. Ahí, Kershaw fue el centro del equipo de fútbol americano de Stafford durante un tiempo.
Casi 15 años después de que sus vidas y sus carreras tomaron distintos derroteros, Stafford y Kershaw coincidieron en Los Ángeles en 2021.
Y ahora el QB de los Rams espera ahora seguir los pasos de Kershaw, quien conquistó su primer título de la Serie Mundial después de cumplir 30 años, tras una larga carrera de trabajo hacia esa meta.
Stafford estará al frente del ataque de los Rams ante los Cincinnati Bengals en el SoFi Stadium, con la oportunidad de completar una de las mejores campañas por parte de un quarterback durante su primer año con un nuevo equipo.
Tras pasar 12 temporadas en Detroit, ha sido la solución para buena parte de los problemas ofensivos de los Rams desde que comienzos del año pasado, cuando llegó al equipo dirigido por Sean McVay.
Pero Matthew no es el único, pues Kupp se ha convertido en el receptor más productivo en el fútbol americano, atrapando los pases de Stafford. Tal como Calvin Johnson lo hacía en Detroit con el mismo quarterback.
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Stafford y Kupp han estrechado sus vínculos con su llamado “Club del Desayuno”. Ambos observan videos cada mañana en el complejo de entrenamiento de los Rams.
“Tengo un montón de compañeros y amigos de la secundaria que han venido a los partidos de playoffs y vendrán también a éste. Han seguido con sus vidas, más allá del fútbol americano, y soy todavía afortunado por hacer esto. Es algo muy especial”, concluyó.
