Los pidieron muchos años y hoy, una pandemia los ha hecho cambiar de opinión. A menos de 50 días de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 –que fueron aplazados el año pasado– el clima entre la sociedad japonesa es de animadversión a la máxima justa deportiva.
Lo que debería ser emoción y jolgorio previo a la llegada de la fiesta olímpica, se ha tornado en incertidumbre y rechazo, pues Tokio aún se encuentra en estado de emergencia –extendido hasta el 20 de junio– y batalla con el único enemigo, además de las Guerras Mundiales, que ha logrado suspender esta justa: el COVID-19.
Hace unos días, el diario Asahi Shimbun, uno de los más influyentes de ese país, pidió al primer ministro, Yoshihide Suga, suspender los Juegos y se reveló una encuesta lapidaria: 83 por ciento de los nipones están en contra de su realización. De este porcentaje, 40 considera que lo más coherente es aplazarlos nuevamente y 43 opina que deben ser cancelados definitivamente; sólo 14 por ciento avala seguir adelante.
Vale destacar que este rechazo tuvo un aumento de 69 por ciento con respecto a abril.
Asimismo, otra encuesta publicada por la agencia de noticias Kyodo revela que 87.7 por ciento de los encuestados están preocupados por la afluencia de atletas y personal que puedan empeorar la propagación del COVID-19 por el territorio.
En este mismo ejercicio estadístico, 59.7 por ciento de los encuestados cree que Tokio 2020 debería cancelarse, frente a un 25.2 que considera que debería seguir adelante, pero sin la presencia de público, y 12.5 cree que sería mejor celebrarlos con público limitado (la entrada de afición extranjera ya está prohibida).
Además de Tokio, Japón mantiene en estado de emergencia a nueve de sus 47 prefecturas, las más pobladas del país del país, por la cuarta ola de coronavirus. Ayer, sumaron 3,036 nuevos casos.
Los Juegos Olímpicos van… porque van
Organizadores y el primer ministro Suga afirman que los Juegos pueden realizarse de manera segura. Ayer, la presidenta del comité organizador, Seiko Hashimoto, dijo que la justa continuaría, a menos, recalcó, que la pandemia impida que la mayoría de los equipos viajen.
“La posibilidad de que los Juegos se celebren es del 100 por ciento, los haremos”, dijo en una entrevista difundida por la BBC y, posteriormente, en un evento realizado en la Ariake Arena, ante deportistas japoneses declaró:
“Estamos completamente preparados, gracias a las medidas de prevención de las infecciones. Y para que Japón se sienta seguro recibiéndolos, les pido a todos los deportistas que sean responsables de sus actos, que respeten las reglas”, añadió.
Previamente, había dicho al diario Nikkan Sports que “sólo si varios países del mundo experimentan situaciones muy graves y las delegaciones de la mayoría de los países no pueden venir, entonces no podríamos aguantar”.
¿Y la postura del Comité Olímpico Internacional? Espaldarazo total a unos Juegos que, todo indica, serán los más caros en la historia, superando las inversiones de Londres 2012 (14,950 mdd) y Beijing 2008 (15,000 mdd).
Aparece el primer caso en delegación deportiva
La Asociación de Futbol de Japón informó que un integrante de la selección olímpica de Ghana dio positivo a COVID-19, el miércoles por la noche al llegar al país. Sin embargo, todo el equipo, que jugará mañana contra el representativo japonés, dio negativo en las 72 horas previas a su salida. Sí, será todo un reto contener al virus.