Su presencia en el último Grand Slam de la temporada emociona a los aficionados y comienza a preocupar a algunas rivales.
María Sharapova llegó al US Open de este año producto de una invitación, el comité organizador del evento que en 2006 conquistó la rusa le dio un wild card y “Masha” lo está aprovechando al máximo.
Ayer la ganadora de cinco Grand Slams conquistó su segundo triunfo del torneo tras superar con parciales de 6-7, 6-4 y 6-1 a Timea Babos, asegurando su presencia en la tercera ronda del evento.
“He jugado mucho tenis en los últimos días. Sólo quería ser la jugadora más apta allá afuera este día y lo fui. Ahora es un día a la vez”, comentó la tenista de 30 años de edad.
El US Open es apenas el quinto torneo que disputa este año Sharapova, tras su regreso a la actividad luego de la suspensión de 15 meses que le fue impuesta por consumo de Meldonium.