Los Patriots, otra vez en lo más alto… Y sin Brady
Los Patriots, otra vez, están en lo más alto de la AFC y listos para dar pelea en Playoffs por el Super Bowl. La reconstrucción apenas duró una temporada
Francisco SánchezCuando Tom Brady se fue de los Patriots para la campaña de 2020, parecía que New England estaba destinado a estancarse en la fase de “equipo en reconstrucción”, pues a pesar de que aún contaban con el genio del entrenador Bill Belichick en las laterales, el talento en el equipo era escaso como para pensar en volver a la élite de la NFL en un tiempo relativamente corto.
En 2020, Brady ganó otro Super Bowl, ahora con los Buccaneers, y los “Pats” vieron por televisión los Playoffs de la NFL por vez primera desde 2008. Llegó la campaña 2021 y el 17 de octubre ponían su récord 2-4 tras caer en tiempo extra ante los Dallas Cowboys. Todo marchaba de acuerdo a la lógica…
Sin embargo, hoy, los Patriots han vuelto a ser el mejor equipo de la Conferencia Americana con siete victorias en fila (las últimas dos ante contendientes de la AFC), son la tercera mejor defensiva de toda la NFL y la primera en puntos recibidos, con sólo 15.4.
Sí, sólo una campaña tardó la “reconstrucción” que para otros equipos puede ser eterna (Dallas, Miami, Cleveland, por citar los ejemplos más representativos). Los Patriots están en el sitio que conocen muy bien, ya enfocados en esa primera siembra que tantos buenos dividendos les ha dado en el pasado con miras al SB: jugar todos los Playoffs en casa.
Pocos equipos han dado la sorpresa de vencer a New England en Foxborough en Postemporada, el último de ellos fueron los Tennessee Titans en la campaña de 2019. Fue un juego que marcó la despedida de Brady con los Patriots y que se pensaba era el fin del quarterback y de la era exitosa del equipo. Ni lo uno ni lo otro.
Pero ¿cómo lo hicieron los Patriots?
De inicio, amplia renovación. De los 22 titulares que jugaron el último partido de temporada regular de la campaña 2020, sólo seis aparecieron en el primer equipo que enfrentó a los Bills el lunes pasado. Los Patriots apostaron por la agencia libre y ser la franquicia que más invirtió de cara a la campaña 2021 está dando resultados inmediatos. De hecho, gastaron 163 millones de dólares para romper la marca que tenían los Dolphins en 2020, de 147.2.
La ofensiva se reforzó con los receptores Nelson Agholor y Kendrick Bourne, así como las alas cerradas Hunter Henry y Jonu Smith. Fue donde más dinero se gastó, pero es en la defensiva donde radica el éxito de estos nuevos “Pats”: Matthew Judon está jugando en un nivel superlativo y es tercero en toda la NFL en capturas de quarterback con 12.5.
Así, el exjugador de Ravens está desquitando el sueldo de 54.5 millones de dólares por cuatro años. Y junto con él, Davon Godchaux y Jalen Mills han mejorado a la defensiva contra la carrera.
Asimismo, J.C. Jackson se ha convertido en el hombre fuerte de la defensiva secundaria y registra siete intercepciones, dos menos que Trevon Diggs (Dallas), el líder de toda la Liga.
Pero también han contribuido “viejos conocidos”, esos jugadores que habían salido y hoy están de regreso, tales como Kyle Van Noy, quien jugó la temporada pasada con los Dolphins y hoy es titular en el cuerpo de apoyadores. Asimismo, recuperaron a Dont’a Hightower, quien renunció a la temporada 2020 debido a preocupaciones por el COVID-19.
Y, finalmente, está el cambio en la posición clave. En la temporada baja se deshicieron de Cam Newton, quien no pudo llenar los zapatos de Brady -¿quién podría?- y apostaron por su selección 2021 del Draft, el novato Mac Jones, que ha sido llevado de la mano de Bill Belichick, tal y como lo hiciera con la hoy leyenda de la NFL.
Jones, sin duda, es el mejor QB novato de esta temporada y ya demostró una gran habilidad para tomar decisiones. Hasta el juego de ayer frente a Buffalo, Mac registraba 70 por ciento de pases completos, dos mil 869 yardas por pase, 16 pases de anotación y ocho intercepciones.
Todas ellas son mejores cifras que, por ejemplo, la primera selección global del Draft, Trevor Lawrence, quien con Jacksonville acumula 58 por ciento de pases completos, dos mil 514 yardas por pase, nueve pases de TD y 10 intercepciones.
Así, los Patriots se van a descansar y se alistarán para cerrar la campaña en Indianapolis, recibiendo a Buffalo, ante Jacksonville y en Miami. Todos ellos, partidos más que ganables para asegurar la primera siembra. Sí, de nueva cuenta pueden soñar con el Super Bowl.