Les soltó la rienda

La que pintaba para ser una de las mejores actuaciones en su carrera y con la cual podría acallar las críticas hacia su trabajo, se convirtió en una nueva tragedia para el mariscal de campo Tony Romo.

El quarterback de Dallas falló en el momento importante, cuando solo restaban dos minutos en el reloj y el marcador estaba empatado 48-48, su pase a Gavin Escobar encontró primero las manos de Danny Trevathan, linebacker de los Broncos, acción que terminaría por cambiar el rumbo del partido.

Tras esta acción, Denver consumió el tiempo y a falta de dos segundos pateó un gol de campo de 28 yardas que les dio su quinta victoria de la temporada al ganar 51-48.

Romo lanzó para 506 yardas, y dio cinco pases de anotación, además de completar 25 de sus 36 intentos.

La noche iba a ser redonda para el mariscal de campo de Dallas, pero la fortuna volvió a darle la espalda, poniendo a los Vaqueros con una marca de 2-3. Aún así el equipo de la Estrella Solitaria encabeza la División del Este de la Conferencia Nacional.

El juego realizado en el Estadio AT&T de la ciudad de Arlington fue un verdadero duelo de quarterbacks. Peyton Manning conectó en cuatro ocasiones a receptores dentro de la zona de touchdown. 

La experiencia del mariscal de Broncos influyó para que en este juego se registraran 99 puntos y se totalizaran mil 39 yardas en forma combinada. Fue el segundo partido con más puntos combinados en tiempo regular desde 1970, cuando se fusionaron la Liga Nacional y la Americana.

“El chico hizo una buena jugada”, comentó Romo, refiriéndose a la intercepción de Trevathan.

Si bien Dallas exhibió las carencias de la defensiva de los Broncos, los propios errores del equipo texano terminaron por costarles su tercera derrota de la temporada en un juego que sin duda será uno de los más recordados.