La mirada del corazón al tiro con arco
Misael Ruiz debió tomar una decisión difícil, llevar una vida lejos de hospitales pero el costo sería perder la vista; sin embargo, eso le abrió las puertas del mundo del Tiro con Arco, donde ha encontrado una motivación para salir adelante
Manuel CuéllarMisael Ruiz debió tomar una decisión difícil, llevar una vida lejos de hospitales pero el costo sería perder la vista; sin embargo, eso le abrió las puertas del mundo del Tiro con Arco, donde ha encontrado una motivación para salir adelante
“Desde los cinco a los 17 años estuve en tratamiento en Centro Médico, en Pediatría, pero a los 17 yo tomo la decisión de que ya no quería seguir con el tratamiento, yo quería ya una vida normal, por así decirlo, además de que el tratamiento me estaba causando cataratas en los ojos y también desprendimiento de retina.
“Obviamente esta decisión iba a afectar mi discapacidad conforme iba avanzando, porque en ese momento veía de los dos ojos. Yo sé que muchos verán esta decisión como algo irresponsable, pero hice mi vida, yo quería estar con mis amigos, estar de fiesta, salir a pasear y lo hice, entonces la verdad es que no me arrepiento de la decisión que tomé”, recuerda Misael, quien ahora tiene 27 años, en entrevista para Reporte Índigo.
Durante todo ese tiempo que no estuvo en tratamiento, ‘Misa’ desarrolló su vida como más lo quiso, inclusive llevaba una vida laboral, pero lo inevitable sucedió, ya que a los 23 años perdió la vista del ojo izquierdo, mientras que del lado derecho ya sólo puede ver dos metros hacia adelante.
Ante esta situación, y al presentar una doble discapacidad, Misael fue obligado a jubilarse desde temprana edad, pues por sus condiciones físicas le era imposible realizar las actividades a las que estaba acostumbrado, por lo que se tuvo que adaptar a una nueva normalidad.
El tiro con arco Cambió su vida
Debido a que su vida cambió drásticamente, Misael aprovechó el tiempo que tenía para explorar nuevos horizontes en su posición, y en lugar de quedarse con los brazos cruzados decidió probar suerte en los deportes, donde descubrió un talento que, hasta ese momento, se mantenía escondido.
“Como me sobraba mucho tiempo, pues me puse a investigar los deportes paralímpicos para ciegos, pero tampoco era como que me llamaran mucho la atención, o sea, me gustaba practicarlos por hobby, pero no para dedicarme al 100 por ciento”, relata.
El primer deporte que practicó fue el goalball, donde la competitividad y el trabajo en equipo le llamaba mucho la atención; sin embargo, su pasión estaría en otra disciplina que apenas iba creciendo en México, el Tiro con Arco.
“Me entero de este deporte previo a un torneo nacional de goalball, ahí nos comienzan a hablar del Tiro con Arco porque era relativamente nuevo, apenas tenía como seis meses en el país y obviamente estaban buscando personas para que comenzaran a practicar este deporte.
“En un principio practicaba los dos deportes, pero la verdad es que era complicado porque entrenaba en sitios diferentes y aparte se me empalmaban los horarios y los días, entonces al ver eso, pues me decido por el Tiro con Arco”, menciona.
La curiosidad de este deporte siguió creciendo en Misael, quien justo antes de celebrar el Año Nuevo en 2018 decidió participar en un campeonato nacional a principios de 2019, decisión que cambió su vida por completo, debido a que ese torneo lo pondría como uno de los mejores en esta disciplina.
no tenía arco ni flechas, al final la UNAM me prestó un equipo, el más básico que te puedas imaginar y con ese participé en el campeonato, pero todo se complicó más porque el guía con el que yo había entrenado no pudo ir y tuvimos que improvisar y mi novia fue la que ayudó en este torneo.
“Para nuestra sorpresa nos dicen que llegamos a la Final, y yo de ‘ok está bien’, y de verdad comienzo a asimilar todo eso hasta que iba a disputar la Final, porque me entra el nervio y más porque iba disputar la Final contra una chava quien fue la que me enseñó todo, siendo sinceros no tenía posibilidades de ganar”, recuerda.
Aunque en su momento Misael acepta que los nervios lo dominaban, el exestudiante de la UNAM venció sus miedos y se coronó Campeón Nacional por primera vez en su carrera, lo cual volvió a repetir el año siguiente para esclarecer las dudas de que no fue ‘suerte de principiante’.
Pese a que ‘Misa’ ha demostrado que es el mejor en el Tiro con Arco para ciegos y débiles visuales en México, el atleta está consciente que aún tiene una deuda pendiente y esa es asistir a una Campeonato Internacional en Las Vegas y a un Mundial, lo cual espera lograr el siguiente año una vez que la pandemia del COVID-19 se controle.