Haber ganado 108 juegos en la temporada regular, con la nómina más alta de Grandes Ligas de más de 228 millones de dólares, fueron los elementos que incrementaron la presión para los Medias Rojas de Boston, que al ganar la Serie Mundial dejaron en claro que estaban hechos para ser campeones.
Y por si fuera poco el talento que reunieron desde un inicio, para la fase final la directiva reforzó el plan del manager Alex Cora con jugadores que fueron claves para el Clásico de Otoño, como el lanzador Nathan Eovaldi y el Jugador Más Valioso de la Serie Mundial Steve Pearce.
Sin embargo, la fuerza de sus rivales de la Liga Americana, Yankees de Nueva York y los Astros de Houston, así como la debilidad en su bullpen hicieron que en algún momento se dudara de que serían campeones, pero solo tres derrotas en toda la Postemporada fueron suficientes para callar a sus detractores.
“No fue tan fácil como la gente cree. Pero empieza con talento, empieza con los dueños, todo el mundo habla de que tenemos la mayor nómina del béisbol. Y eso es un reto, la manera en que nos ven los medios y los fanáticos”, reconoce el manager Alex Cora.
La cifra de 108 ganados es casi una garantía de que quien la consigue durante la campaña regular terminará como campeón, ya que de los 12 equipos que en la historia de las Grandes Ligas han llegado o rebasado esa cantidad de triunfos se coronó campeón.
Para Boston es la primera vez que lo consigue, de hecho, fue la mejor temporada de su historia, lo cual no consiguieron ni en la época de Babe Ruth, considerado el mejor beisbolista de la historia, aunque de las cuatro veces que han rebasado el centenar de victorias han sido campeones tres ocasiones y en una, 1946, cayeron en la final.
Tras la venta de Babe Ruth a los Yankees en 1919, cuando comenzó la ‘maldición del Bambino’, los Medias Rojas no volvieron a ganar un título hasta 2004 y de ahí ya suman cuatro campeonatos, para ser el equipo más ganador de este siglo.
Los festejos
Los Medias Rojas anunciaron que el desfile de campeones por las calles de Boston será el próximo miércoles a partir de las 11 de la mañana, donde lucirán el trofeo de la Serie Mundial y los anillos de los jugadores, aunque ya fueron recibidos ayer en el Fenway Park por sus seguidores.
Acerca de si el equipo visitará la Casa Blanca con el presidente Donald Trump, el manager Alex Cora señaló que eso se platicará después, ya que mientras estarán enfocados en pasarla bien con los festejos.
Sin embargo, Cora ha tenido desacuerdos con Trump, especialmente después de cuando el huracán Florence afectó Puerto Rico y el mandatario estadounidense desestimó los daños en la isla del Caribe.
Desde que Trump llegó a la Casa Blanca varios jugadores de los equipos campeones de la NFL, Grandes Ligas y la NBA se han negado a acudir al recibimiento del mandatario, al no estar de acuerdo con sus políticas en contra de las minorías y a los ataques verbales a los deportistas.
El décimo mexicano
Héctor Velázquez se sacó la lotería. Después de haber tenido una exitosa temporada con marca de 7-2, 3.18 de efectividad, números que no fueron suficientes para que el manager Alex Cora lo tomara en cuenta para los Playoffs, en donde solo estuvo como reserva.
Sin embargo, Velázquez es el décimo mexicano en tener un anillo de campeón de la Serie Mundial, por su participación en la campaña regular es merecedor del reconocimiento de las Grandes Ligas por ganar la Serie Mundial.