Partidos cancelados, jugadores en cuarentena y argumentos en torno a los mandatos de la vacuna contra el COVID-19. El deporte en Alemania lidia con nuevas interrupciones cuando el país pasa por una cuarta ola de infecciones de coronavirus.
Uno de los principales clubes de la Bundesliga, el Bayern Munich, tenía cinco jugadores en cuarentena el lunes debido a que no están vacunados contra la enfermedad y dos más en aislamiento luego de que contrajeron el COVID-19. Y todo apunta a un conflicto interno debido a que el club contemplaría descontarle el sueldo a los jugadores que no están vacunados, tales como Joshua Kimmich, Serge Gnabry, Jamal Musiala, Eric-Maxim Choupo-Moting y Michael Cuisance.
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— FC Bayern München Español (@FCBayernES) November 22, 2021
“Es obvio”, comentó el técnico del Bayern Julian Nagelsmann, quien se perdió cuatro encuentros del equipo tras contraer la enfermedad pese a estar vacunado.
El Bayern sufrió una inesperada derrota de visita al Augsburgo el viernes, con Kimmich ausente. Se teme que los jugadores que no están vacunados puedan perderse el enfrentamiento contra el Borussia Dortmund (previsto para el 4 de diciembre) que está un punto detrás del Bayern en la tabla de la Bundesliga y su equipo está completamente vacunado o recuperado de la enfermedad.
El Dortmund informó el estatus de vacunación de sus jugadores el lunes, luego del resultado positivo de Thorgan Hazard. Ningún otro jugador se ha visto afectado.
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Sin contar con varios jugadores, el Bayern también tendrá menos aficionados para sus partidos en casa. Las autoridades del estado de Baviera redujeron al 25% la capacidad para todos los eventos deportivos en un intento para poner bajo control el repunte de infecciones.
La situación es peor en el estado de Sajonia, que ha prohibido por completo la presencia de público para contener los contagios. El evento de la Copa Mundial de salto de esquíes en Klingenthal se escenificará sin espectadores entre el 9 y 12 de diciembre. Los clubes de fútbol Leipzig, Dínamo Dresden y Erzgebirge Aue disputarán sus partidos de local a puertas cerradas.
