La temporada de 2021, que parecía “El último Baile” de Aaron Rodgers con los Packers, no terminó como se esperaba, pues a pesar de concluir la temporada regular como el mejor equipo de la Conferencia Nacional, el equipo cayó 13-10 en el Juego Divisional ante los San Francisco 49ers.
Se pensaba que la imagen del QB yéndose cabizbajo a los vestidores del Lambeau Field sería la última de él en la NFL; sin embargo, el “12” no se retiró. Al contrario, firmó una extensión de contrato por cuatro años con Green Bay que, una vez más luce como amplio favorito, no sólo para llevarse el Norte de la NFC, sino para llegar al Super Bowl.
No importa que Rodgers haya perdido a su principal “blanco”, Davante Adams, quien emigró a Las Vegas, pues el veterano es capaz de llevar a los primeros planos al equipo, esto gracias al sistema del coach Matt LaFleur, e incluso los siete partidos en los que no estuvo el receptor estelar los Packers los ganaron todos y con un promedio de 31.6 puntos.
Para cubrir el hueco de Adams y de Márquez Valdés-Scantling (firmó con los Chiefs), estarán Allen Lazard, Randall Cobb, Sammy Watkins y el novato Romeo Doubs.
Pero, sin duda, la clave para las aspiraciones de Super Bowl de los “Cabezas de Queso” se sustentan en lo que pueda hacer su defensiva, que este año pinta para ser una de las mejores de la Liga, sobre todo por el cuerpo de apoyadores que tienen: Preston Smith, De’Vondre Campbell y Rashan Gary lucen para dar serios dolores de cabeza a los ataques rivales.
Y detrás de los Packers, el equipo de esta división que pinta para pelear por Playoffs son los Detroit Lions, que se ven sólidos pese a haber terminado la campaña de 2021 con récord de 3-13. La llegada del ala defensiva Aidan Hutchinson, vía Draft, parece ser la última pieza en la reconstrucción del equipo dirigido por el coach Dan Campbell.
A la ofensiva, el quarterback Jared Goff debería sentirse mejor en su segunda temporada en Detroit con un grupo de receptores de respeto: Amon-Ra St. Brown, quien fue una revelación el año pasado en su temporada de novato, así como Jameson Williams y el veterano D.J. Chark, quien llega procedente de los Jaguars.
Por su parte, los Vikings estrenan entrenador en jefe en la figura de Kevin O’Connell, quien construirá un ataque alrededor del receptor abierto Justin Jefferson y el corredor Dalvin Cook; sin embargo, el gran problema será la defensiva, que tendrá el regreso de Danielle Hunter y la llegada de Za’Darius Smith, exjugador de Green Bay.
Finalmente, los Chicago Bears están destinados a ocupar el sótano del Norte de la Conferencia Nacional. El nuevo entrenador en jefe, Matt Eberflus, quien es un especialista a la defensiva, buscará crear una nueva versión de los “Monstruos del Midway”, pero sin Khalil Mack, quien fue cambiado a los Chargers. A la ofensiva, el QB de segundo año, Justin Fields seguirá batallando.
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