En Francia 98, por primera vez Croacia participó en un Mundial como nación independiente de Yugoslavia, y el asalto fue hasta las semifinales, donde perdieron con el local y campeón Francia y luego en se quedaron con el tercer lugar ante Croacia; el problema es que desde entonces no han vuelto a pasar siquiera de la primera fase.
La generación de Davor Suker y Robert Prosinecki le dejó una tarea bien complicada a los herederos, pero luego de 20 años de fracasos, en esta ocasión los croatas cuentan con una lista de nombres talentosos y que con sus equipos han ganado torneos locales e internacionales.
La de ahora es comandada por un mediocampo de lujo con Luka Modric, Mateo Kovacic, Marcelo Brozovic, Ivan Perisic e Ivan Rakitic, con Mario Mandzukic en el ataque, quien además sabe jugar atrás, recuperar y defender como lo hace con Juventus.
Importante será que Croacia no subestime a sus rivales de grupo, porque la aduana más difícil es Argentina y el segundo puesto estará peleado con Islandia y Nigeria, y que no les ocurra lo que en Brasil 2014 cuando vieron por debajo del hombro a México que les arrebató el boleto a Octavos junto con el anfitrión.