La vida de Aaron Hernandez nunca volverá a ser la misma. Los emparrillados, el balón y su uniforme de futbolista quedaron de lado, ahora le rodea la oscuridad de un penal, la tradicional ropa de un preso y la soledad del encarcelamiento.
Desde aquel 26 de junio de 2013 cuando se informó la detención del ala cerrada de los Patriotas de Nueva Inglaterra, implicado en el asesinato de su amigo Odin Lloyd, de 27 años, el calvario para el exfutbolista no ha parado.
Aaron Hernandez fue encontrado culpable por asesinato en primer grado, obteniendo una sentencia de cadena perpetua y sin posibilidad de obtener su libertad condicional, según su veredicto.
Durante la lectura de la sentencia, Hernandez parecía molesto, pero siempre se mostró tranquilo, como sabiendo que su destino no podía ser mejor. Frunció los labios, respiró profundo y le dijo a su abogado: “está bien”.
Ese terrible momento lo llevará sujeto a su memoria por el resto de su vida. Al igual que su madre Terri, y su prometida Shayanna Jenkins, quien no dejaron de llorar mientras se leía la sentencia de Aaron.
Del otro lado, Ursula, la madre de Lloyd. Aún dolida por la pérdida de su hijo, tuvo la fortaleza para ser parte de la lectura de sentencia contra Hernandez. Tan pronto escuchó las palabras “cadena” “perpetua”, abrazó a su familia y dio gracias a la fiscalía que trabajó en el caso.
Los testimonios duraron más de dos meses y las deliberaciones de los jurados duraron seis días. No hubo testigos del asesinato, tampoco hubo videos y no se encontró el arma del homicidio.
Pero los jurados determinaron que Hernandez actuó de manera premeditada y cruel en el asesinato ocurrido en 2013, y por eso la categoría de homicidio en primer grado.
La condena es cadena perpetua porque las leyes en Massachusetts son así. En casos de asesinato premeditado haya pocas opciones más allá de la cárcel de por vida y esa suerte le tocó al exfutbolista de los “Pats”.
¿Qué lo implicó?
De acuerdo a las investigaciones, los fiscales dijeron que Odin Lloyd fue visto por última vez el 17 de junio de 2013, esto alrededor de las 2:30 horas con Hernandez, Carlos Ortiz y Ernest Wallace, amigos de Aaron, viajando en un auto Nissan Altima plateado rentado. Horas después, el cadáver acribillado de Lloyd fue encontrado por un sujeto que salió a correr.
Wallace y Ortiz eran viejos amigos de Hernández, quien tenía total control sobre ellos, dijo la fiscalía. “Estos tipos… harán lo que él quiera”, dijo el fiscal.
La policía sospechó de Hernandez casi de inmediato porque en un bolsillo en la ropa de Lloyd encontraron la llave del vehículo que fue alquilado por el exjugador de la NFL.
Sin que todavía haya sido revelado el motivo que llevó a Aaron a asesinar a Odin, la fiscalía aseguró que el asesionado debió haber dicho o hecho algo que no le cayó bien a Hernandez, para que el exfutbolista planeara junto a sus amigos el momento para ultimarlo.
Wallace y Ortiz, quienes también están acusados, se declararon inocentes y serán juzgados por separado.
El abogado defensor, James Sultan, le dijo al jurado que Hernandez solo fue testigo del asesinato de Lloyd, “cometido por alguien que él conocía”, y que el exjugador de la NFL “realmente no supo qué hacer, así que intentó seguir con su vida de forma normal.
Sultan comentó al jurado que Lloyd, quien trabajaba para una firma de paisajismo hasta antes de su muerte, fue atacado por otros dos hombres que eran traficantes de drogas y ellos lo ultimaron.
Frente a la condena de cadena perpetua, Hernandez todavía tendrá que enfrentar otro juicio en Boston por un tiroteo en el que murieron dos hombres.
Aunque la fiscalía teorizó que Lloyd probablemente sabía algo acerca de ese tiroteo, situación que pudo ser el motivo final del asesinato, este detalle quedó solo como mera especulación.
De tales cargos, Aaron se declaró inocente y será en mayo cuando ese juicio se inicie, aunque los funcionarios aseguran que será reagendado.
Nada a favor
Aunque la defensa de Aaron Hernandez alegó que las pruebas presentadas era sólo circunstanciales, y trató de culpar a Ortiz y Wallace de los disparos, el vídeo de vigilancia en la casa de Hernández poco antes de los disparos con un arma de fuego, y las muestras de ADN de Hernández encontradas en el cuerpo de Lloyd, dieron solidez a la acusación.
> En 2013, Aaron Hernandez fue ventilado a través de un video grabado por las cámaras de seguridad de su propia casa, mientras sostenía un arma de fuego, minutos después de que su amigo Odin Lloyd fuera asesinado.
Los fiscales revelaron en aquel momento sobre el hallazgo de un casquillo percutido calibre .45 dentro del coche alquilado por la exestrella de los Patriotas de Nueva Inglaterra. La bala hizo juego con las otras cinco encontradas en el cuerpo de la víctima.
Las fotografías fueron tomadas de los videos recuperados entre las 14 cámaras de la vivienda en North Attleboro, Massachusetts.
Aunque Hernandez había manipulado las cámaras, los investigadores fueron capaces de recuperar las fotografías y proceder en la indagatoria que hoy lo condena de por vida.
Las imágenes ayudaron a la policía a construir una línea de tiempo que supuestamente conduce a la muerte de Lloyd y a la culpabilidad de Hernandez.