Franco Harris hizo la ‘inmaculada recepción’. Te contamos qué es
El excorredor de los Steelers fallecido hoy fue protagonista de la jugada más grande en la historia de la NFL, la cual, también es muy polémica, pues pudo ser ilegal
Indigo StaffFranco Harris, quien falleció esta madrugada, protagonizó el 23 de diciembre de 1972 la que es descrita como la mejor jugada -y más controvertida- en la historia de la NFL: la recepción inmaculada.
Era el Juego Divisional entre los Steelers y los entonces Oakland Raiders. Pittsburgh caía 7-6 con 22 segundos en el reloj. En cuarta y 10, desde su yarda 40, el QB Terry Bradshw lanzó un pase a John Fuqua, quien era cubierto por Jack Tatum.
Sin embargo, el balón salió rebotado y cuando iba cayendo al suelo, aparecieron las manos milagrosas de Harris para tomar el ovoide y correr hacia la zona de TD para darle a los Steelers su primera victoria en Postemporada.
Pero así como histórica, esta recepción sigue generando mucha polémica, debido a que pudo ser ilegal, pues si el balón sólo fue tocado por Fuqua, la recepción no debió contar.
¿Qué decía la regla?
La regla establecía que si un jugador ofensivo tocaba un pase primero, éste era el único elegible para atraparlo. “Sin embargo, si un defensivo tocaba el balón primero, simultáneamente o después de haber sido tocado por un jugador ofensivo, entonces todos los jugadores ofensivos se vuelven y siguen siendo elegibles” para atrapar el pase.
Ante ello, y tras varias minutos y revisiones se decretó TD, pues no hubo evidencia que el balón fuera tocado sólo por la manos de Fuqua o el casco de Tatum. Se dice que esta fue la primera jugada en que se utilizó a las cámaras de TV para tomar la decisión sobre una jugada.
Esta regla fue rescindida en 1978.
“Y miré hacia arriba y estiré las manos y, ya sabes, supongo que mis manos estaban en el lugar correcto”, dijo el corredor al término del partido. Asimismo, un jugador de Raiders se quejó de un bloqueo ilegal mientras Franco se encaminaba hacia las diagonales.
La jugada representó un punto de inflexión para los Steelers, que dejaron de ser un equipo perdedor y comenzaron a ser protagonistas, al grado de que para finales de la década de los 70 ya contaban con cuatro anillos de Super Bowl.
A propósito de la jugada, John Madden, leyenda de la NFL y entonces coach de los Raiders, afirmó que nunca superaría ese momento y a pesar del pasar de los años, no sabía con certeza lo que había pasado en ese momento que el balón salió rebotado.