La FIFA suspendió a Luis Rubiales para evitar que el ahora expresidente de la Real Federación Española de Futbol (RFEF) manipulara los testigos de una investigación en su contra, dijo el ente rector en el veredicto escrito que explicó la decisión.
Rubiales fue suspendido por la FIFA el 26 de agosto para salvaguardar la investigación por el comportamiento del dirigente en la final de la Copa Mundial femenino, en la que le propinó un beso en la boca a la jugadora Jenni Hermoso, durante la ceremonia de premiación.
El castigo provisional fue ordenado “particularmente para que los posibles testimonios pudieran ser dados de manera libre y sin ningún tipo de presión, temor o represalias”, escribió Jorge Palacio, el juez disciplinario de la FIFA.
Para suspender a Rubiales durante la investigación, la FIFA nada más necesitaba cumplir con una de cuatro posibles razones. El juez encontró que se cumplían los cuatro criterios, según el veredicto. Los motivos fueron “asegurar la administración correcta de justicia, preservar la disciplina deportiva, evitar un daño irreparable y razones de seguridad“.
Rubiales es investigado por otros incidentes
El documento de nueve páginas indica que los otros incidentes que forman parte de la investigación incluyen el momento en el que Rubiales se tocó los genitales al celebrar la victoria de España por 1-0 ante Inglaterra y “cargar a la jugadora española Athenea del Castillo sobre su hombro durante los festejos post partido”.
Palacio removió a Rubiales de toda función en el futbol por sus acciones y las de la Federación española entre el 25 y 26 de agosto. Hermoso fue amenazada con ser demandada por la federación. La jugadora y allegados recibieron amenazas para hablar favorablemente sobre el incidente.
Hermoso, fue contactada por la FIFA para confirmar sus declaraciones públicas y lo hizo mediante un correo electrónico el mismo día, de acuerdo con el documento. Rubiales renunció a los cargos de presidente de la federación y de vicepresidente de la UEFA el 10 de septiembre.