La FIFA abrió un expediente disciplinario a Alemania el lunes. Pero no por la protesta de sus jugadores, cubriéndose la boca con las manos, antes de un partido del Mundial Qatar 2022 la semana pasada.
El caso se corresponde con la decisión de la federación alemana de no presentar a ningún jugador en la conferencia de prensa obligatoria en la víspera de los encuentros, explicó el órgano rector del fútbol mundial.
El seleccionador, Hansi Flick, compareció solo el sábado ante la prensa internacional en Doha antes del duelo del Grupo E contra España. Señaló que no quería agobiar a sus futbolistas antes del importante partido, que terminó en empate 1-1.
Alemania eligió un lugar de concentración lejos de la capital qatarí, donde están la mayoría de las 32 selecciones. Su campamento está en un hotel en un balneario en el extremo norte de la península, a unos 110 kilómetros (70 millas) de Doha.
La FIFA no dijo cuándo resolverá el caso, que seguramente se saldará una pequeña multa.
La federación alemana ha criticado a la FIFA por su rechazo a permitir que los capitanes de algunas selecciones europeas empleasen en Qatar un brazalete de la campaña antidiscriminación “One Love”, que buscaba llamar la atención sobre el historial de derechos humanos de la anfitriona.
En su primer partido, los jugadores posaron para la foto de equipo con la mano derecha sobre la boca. Alemania perdió 2-1 con Japón.
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