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Lo difícil para Andrés Guardado, además de la derrota del Valencia, fue que en el partido decisivo se quedó en la banca
Lo que era un sueño de trascendencia, en dos días se volvió polvo en el viento. Paris Saint-Germain venció en el global 3-2 al Valencia de Andrés Guardado, sepultando así las esperanzas de tener un mexicano en la Champions League.
Apenas el martes el Real Madrid acabó con la vida del Manchester United de Javier Hernández camino a los Cuartos de Final, pero con ambos clubes eliminados el torneo europeo dejó un sin sabor en la afición mexicana.
Lo difícil para “Chicharito” y Guardado, además de las derrotas para sus equipos en la Liga de Campeones, fue que en los partidos decisivos disputados esta semana no tuvieron oportunidad de dejar la banca para ver acción en el campo de batalla.
Empatar en el Parque de los Príncipes fue suficiente para los parisinos, que de ir perdiendo porque Jonás adelantó al Valencia al 54’, encontraron la felicidad por nunca bajar los brazos pese a no contar con su figura, Zlatan Ibrahimovic, ni tampoco recurrir al astro inglés, David Beckham.
El cuadro naranjero tuvo voluntad, fe, pero fueron víctimas de sus propios errores. Todo marchaba de forma esperada desde que aventajaron en el marcador, ilusionándose con la proeza de eliminar a uno de los millonarios y favoritos del espectáculo en el futbol de Europa.
La falta de contundencia fue factor para que los valencianos se quedaran en el camino, aunado a que dos importantes estadísticas les hicieron sombra y finalmente se cumplieron: PSG tenía 22 partidos consecutivos sin perder en su estadio, además de que los españoles tenían ocho duelos sin ganar fuera de casa en partido eliminatorio en Europa.
Fue entonces cuando en el ingreso de Gameiro por Thiago Motta al 55’ le inyectó revulsión a los locales, concretándose la igualada que cortaría de tajo las ilusiones de los visitantes.
Gameiro, que debutó ayer en esta competencia, al 66’ generó el contragolpe magistral que le permitió un primer disparo al arco, el arquero la tapó pero el argentino Ezequiel Lavezzi volvió a empujarla y la mandó al fondo de la portería, regresando así al equipo de los petrodólares a unos Cuartos de Final de Champions League después de 18 largos años.
Aunque hasta los últimos minutos el Valencia no dejó de luchar, el partido estaba más que definido a ojos del mundo.
Necesitaban de un milagro de dos goles que nunca llegó, por eso tuvieron que despedirse de su sueño por la “orejona” en este 2013, y con ello también se fue el sueño de los mexicanos por ver triunfar a Guardado, como no se ha podido ver hasta ahora.
