A México, Colombia o Paraguay les convendría comprimir sus competencias o parar en la segunda mitad de ese año
En un hecho sin precedentes en la historia del futbol, los calendarios y torneos de todo el mundo se verán seriamente modificados por la próxima celebración del Mundial de Catar 2022 que, por decreto de la FIFA, se llevará a cabo en el otoño de ese año.
De acuerdo a la aprobación oficial del Comité Ejecutivo de la FIFA reunido en Zúrich, Suiza, la final de la Copa del Mundo en el Golfo Pérsico se jugará el 18 de diciembre, día nacional del país. Será un torneo de cuatro semanas y durará cuatro días menos que otras ediciones.
Aunque no se tiene definida la fecha de inicio del evento, se calcula que arranque a finales del mes de noviembre de 2022. En promedio, las selecciones nacionales siempre se concentran un mes antes del evento, es por eso que la mayoría de los torneos del mundo deberán detenerse en ese mes para alistar los equipos.
La FIFA respaldó la propuesta de su propio grupo de trabajo, el cual elabora el calendario internacional para el periodo 2018-2024 y que cuenta con el apoyo del sindicato internacional de jugadores (FIFPro) y de las seis confederaciones de la FIFA, pero con el rechazo de las Ligas y los Clubes Europeos (EPFL) y (ECA).
Y es que el reclamo vendría porque en las principales ligas del mundo, como las de España, Alemania, Italia, Inglaterra o Portugal celebran cada año su campeonato largo entre los meses de agosto y mayo, del siguiente año.
Después de su culminación, los jugadores de estos y otros países más estarían obligados a parar por seis meses para esperar el Mundial.
Pero sería el continente americano el que sufriría de más con esta postura de celebrarlo entre noviembre y diciembre por razones climatológicas, dado que el verano en Catar suele rebasar los 40 grados Celsius.
Brasil tiene su torneo de Primera División entre los meses de mayo y diciembre. Argentina va de febrero a diciembre, mientras que México, Colombia o Paraguay, entre otros, tienen dos campeonatos que van de enero a mayo y de julio a diciembre.
En estos casos donde acostumbran un año futbolístico con dos campeonatos, lo único que les convendría sería comprimir sus competencias o parar en la segunda mitad de ese año.
Aunque surgieron propuestas para retrasar el Mundial del 2022, el Grupo de Trabajo de la FIFA argumentó que el periodo que va entre finales de noviembre y finales de diciembre era “la ventana más efectiva” para su realización, ya que por razones legales el Mundial no podía posponerse hasta 2023.
La sugerencia de la UEFA, para que la final se jugara hasta el día 23 de diciembre, fue desestimada, todo con el fin de hacer coincidir el partido por el título con el día nacional de Catar, una semana antes de esa fecha.
El Grupo de Trabajo para el calendario internacional de partidos tendrá que reunirse ahora para decidir sobre el período 2019-2022.
Esta reunión del Comité Ejecutivo es la penúltima que presidirá Joseph Blatter antes de las elecciones en las que el dirigente suizo buscará su quinto mandato.
> Desde su designación como sede oficial de la edición 2022, Catar se ha convertido en el tema más polémico en la historia de la FIFA. Los presuntos sobornos para ganar la candidatura, el clima, los calendarios y la falta de acuerdos han llevado a este país a ser el centro de la discusión.
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