La temporada de la NFL está de vuelta, el comienzo de la actividad deportiva es un bálsamo para los fanáticos que soportan la larga espera entre el fin de una campaña y el comienzo de la siguiente.
Pero este año el inicio se ha vuelto polémico para la Liga, pues con el futbol en el campo también volvieron los escándalos de violencia protagonizados por sus jugadores.
Todavía sin digerir una serie de conflictos que han marcado al deporte de las tacleadas, como el suicidio de Junior Seau o el homicidio culposo de Aaron Hernández, ahora la NFL lidia con el caso de violencia doméstica de Ray Rice, el corredor de los Cuervos de Baltimore que en febrero pasado golpeó brutalmente a su esposa en el interior de un elevador en Revel Casino Hotel, y que a estas alturas del año, ha sido ventilado el acto a la luz pública.
A esto se suman otros escándalos y hechos violentos, incluso demandas interpuestas por exjugadores que recienten su salud tras años de vivir entre golpes sin mayor cuidado o aviso de seguridad.
¿Cómo podrá salir bien librada la NFL de este nuevo problema? Parece que su postura de suspender indefinidamente al jugador es un precedente radical frente a la violencia, como buscando colocarse en el papel inquebrantable por la conducta de sus jugadores.
Previo al arranque de la temporada, la Liga atendió más de 30 multas a sus jugadores por distintas violaciones de conducta.
El propio comisionado de la NFL envió una carta a los 32 dueños de equipos y pidió que ésta sea distribuída en los vestuarios. “La violencia doméstica y la agresión sexual son inaceptables. Son delitos. Nunca son aceptables y no serán tolerados bajo ninguna circunstancia”.
Más allá del aterrador momento en que la mujer de Ray Rice fue golpeada en ese elevador, el análisis exhaustivo de la NFL podría estar encamino hacia las acciones que terminen con la violencia que impera en tan golpeada liga profesional.
Año tras año se registran casos similares. Asesinatos, pleitos de cantina, suicidios y violencia física son situaciones de conflicto o comportamiento compulsivo que podrían derivar de las lesiones cerebrales que causa el deporte.
Ocho meses después de la muerte del exjugador Junior Seau, el legendario linebacker de los Cargadores de San Diego que se quitó la vida en medio de una seria depresión posterior al abuso de alcohol y pastillas, científicos examinaron su cerebro y determinaron la evidencia de Encefalopatía traumática crónica (CTE por sus siglas en inglés).
La CTE es una enfermedad neurológica grave vinculada a las conmociones cerebrales. Este padecimiento ha sido factor de muerte en muchos otros casos de jugadores de la NFL.
Resulta imposible determinar el grado de velocidad en que la CTE afecta a los futbolistas, pero sin duda tiene relación con los diferentes hechos registrados en la liga de futbol americano.
Sus principales síntomas tienen que ver con la depresión, el insomnio, retraimiento emocional, y el comportamiento compulsivo.
Esta condición degenerativa no tiene cura, inclusive la NFL cree que no hay suficiente evidencia para concluir que que jugar al futbol americano causa la CTE, pero por lo menos reconoce la conexión científica entre su deporte y el daño cerebral a largo plazo.
El trastorno de Ray Rice puede no ser solo culpa de un enojo particular con su pareja.
Su comportamiento y el de muchos jugadores en su situación puede ser causa de las contusiones cerebrales que sufren por el deporte y es posible que esto sea solo el comienzo de una exhaustiva batalla.
1. Aaron Hernández
El exjugador de los Patriotas de Nueva Inglaterra, fue arrestado y culpado del asesinato de Odin Lloyd, de 27 años, de quien se dice que era amigo. El abogado de Hernández, Michael Fee, dijo que su cliente se declara no culpable.
2. Junior Seau
El linebacker perdió la vida al pegarse un tiro en el pecho con una escopeta por los daños de la CTE. A raíz de este problema, la NFL encara demandas de exjugadores que dicen que la liga ocultó información sobre los peligrosos efectos secundarios de las conmociones cerebrales.
3. Chad Ochocinco
El receptor veterano de la NFL, Chad Johnson, fue separado de los Delfines de Miami después de su arresto por supuestamente golpear brutalmente en la cabeza a su esposa.
4. Ben Roethlisberger
El mariscal de campo de los Acereros de Pittsburgh fue demandado en 2008 por la empleada de un hotel en la ciudad de Lake Tahoe, por presuntamente violarla.
NFL sabía del video
Por Carlos Ledezma
Roger Goodell, quien es el Comisionado de la NFL, y también está en el centro de las críticas en el tema de Ray Rice por haberle dado un castigo de dos partidos al exjugador de Baltimore antes de que apareciera el video, aseguró que no había visto las imágenes de la agresión, pero según nuevos reportes, personal de la Liga sí conocía la gravedad del incidente y pudo haber informado de lo ocurrido.
Charles Latibeaudiere, coproductor ejecutivo del sitio TMZ, le dijo el lunes por la noche a la cadena FOX Sports que pese a las afirmaciones de la NFL, en el sentido que no conocían la existencia del video, fuentes del Casino Revel le dijeron a TMZ que gente de la Liga fue al casino poco después de los hechos y vieron las imágenes.
Latibeaudiere reconoció que Goodell no estaba entre los que asistieron al casino para revisar la cinta, pero la Liga sabía que existía un video de vigilancia, el cual habrían podido pedir para analizar en caso de no saber a ciencia cierta lo que pasó en el elevador.
Sin embargo, el personal de la NFL nunca pidió algún tipo de detalles al casino, hasta que el sitio TMZ dio a conocer el caso el lunes.
Su jersey vale una pizza
En Baltimore no se dejó pasar el momento y la pizzería Hersh’s Pizza and Drinks inició una campaña que tuvo una rápida y positiva respuesta.
El restaurante anunció en su página de Facebook que daría pizza gratis a cambio de los jerseys de Ray Rice.
“Queridos Amantes de las Mujeres, de No Golpear a las Mujeres, de la No-Violencia y de Simplemente Ser Una Buena Persona, vengan a cambiar sus jerseys de Ray Rice por pizza gratis en Hersh’s. Estos jerseys nos ahorrarán dinero en papel higiénico esta semana”, decía el anuncio posteado en la red social horas después de darse a conocer el video.
Además, Hersch’s indicó que por cada camiseta que se done, la pizzería donará 2.70 dólares, (el jersey de Rice era el número 27) a la House of Ruth Maryland, una organización sin fines de lucro que se dedica a ayudar a las mujeres y niños que son víctimas de violencia doméstica.
Otro local de Baltimore, el No Idea Tavern, también se unió a la iniciativa y ofreció bebidas gratis a los aficionados que quieran deshacerse de los jerseys de Rice.
Pégame, pero no me dejes
Parece que a Janay Palmer le dolió más la actitud tomada por los medios de comunicación que juzgaron y crucificaron a su esposo Ray Rice, que el golpe que este le propinó en el elevador del casino.
Cuando se esperaba que la esposa del excorredor de los Cuervos de Baltimore, quien fue la víctima tras haber sido noqueada por su entonces prometido, aprovechara la oportunidad para dar detalles y reconocer si era víctima de violencia doméstica, su postura fue todo lo contrario.
Janay escribió en su cuenta de Instagram que nadie sabía el daño que se le causó a su familia, pero ella y Rice seguirían juntos para demostrar el amor verdadero.
“Si sus intenciones son hacernos daño, avergonzarnos, hacer que nos sintamos solos y alejarnos de la felicidad, han tenido éxito en muchos niveles. Nadie sabe el daño que los medios y las opiniones indeseadas del público causaron a mi familia. Es nuestra vida, ¿por qué no se van todos?.
“¡Esta es nuestra vida! ¿Por qué no lo entienden?”, dice el comunicado que publicó en la red social y que finaliza así: “Sepan que continuaremos creciendo y mostrándole al mundo lo que es el verdadero amor”.
Un mes después del incidente, Janay y Ray Rice se casaron, en julio ambos dieron una rueda de prensa donde lamentaron sus acciones, las cuales calificaron de “reprochables”, y aseguraron que iban a terapia para dejar atrás sus problemas.
Rice se queda sin su ‘palomita’
Como era de esperarse, Ray Rice también fue perdiendo el apoyo de sus patrocinadores tras el video que se dio a conocer, y haber quedado fuera de los Cuervos de Baltimore.
El último, o más reciente en decirle adiós a su relación con el excorredor fue la marca deportiva Nike.
“Rice ya no un atleta Nike”, informó Brian Strong, portavoz de la marca de la palomita.
De esta forma se unió a deportistas como Lance Armstrong, Justin Gatlin y Michael Vick, a quienes también se les rescindió su contrato publicitario por problemas extradeportivos.
Rice además saldrá del videojuego Madden NFL 15.
Baltimore rescindió el contrato de Rice, que era de cinco años y con un valor aproximado de 40 millones de dólares. En 2012, el salario base del excorredor fue de 2 millones, en 2013 de un millón, y para este año llegaba a los 4 millones.
Según reportaron los medios, para 2015 y 2016, recibiría un sueldo de 3 millones de dólares.
¿Y las otras ligas?
Si bien la NFL ha sido noticia por los problemas de algunos de sus jugadores, los otros deportes también tienen su lado oscuro, solo que no ha sido tan constante como el del futbol americano.
El racismo se ha convertido en el tema de mayor discusión en el básquetbol de Estados Unidos, pero también se han dado casos de violencia doméstica, como el de Dante Cunningham.
La Liga Profesional de Hockey es quizá la menos castigada en meses recientes por escándalos, pero también ha sufrido problemas económicos y del uso de drogas por parte de algunos de sus jugadores.
Principalmente el uso de esteroides es lo que ha golpeado a las Grandes Ligas. Esta organización ha aumentado las sanciones para evitar que se sigan consumiendo sustancias prohibidas.
Arreglo de partidos, problemas económicos y de corrupción son algunos de los conflictos más recurrentes en el futbol, aunque tampoco se descartan casos de dopaje, aunque en una menor medida.