"Esta es otra generación, otra selección pero ya a darle la vuelta a la pagina, que si dolió pero ya hay que pensar en Canadá"
Se acaban las excusas y los argumentos para tratar de justificar el mal desempeño de las Selecciones Nacionales, que simplemente no encuentran la solución a la enfermedad que las ataca.
No importa si se trata del equipo “B” o una supuesta nueva generación de jugadores, los resultados para el futbol mexicano siguen siendo desastrosos, sin tomar en cuenta qué tan fuerte o débil pueda ser el rival.
Anoche en la ciudad de Pasadena, California, México sufrió una nueva e histórica derrotada de 2-1 ante Panamá en el Rose Bowl, en el que fue su primer juego dentro de la Copa Oro, donde se supone que son el equipo a vencer por llegar como el vigente campeón.
Un primer tiempo desastroso donde Panamá presionó desde la salida a México, y los elementos del Tri no dieron una cuando de buscar el arco rival se trató.
Fue un penal a favor de los canaleros el que puso tenso el partido desde el inicio, esto cuando Raúl Jimenez derribó a Alberto Quintero al minuto 7 del encuentro para que Gabriel Torres concretara el gol de la ventaja al superar el lance de Jonathan Orozco.
El Tri se complicó mucho, dio señal de que lo ocurrido contra Gallos Blancos en Querétaro a mitad de la semana pasada no fue casualidad, ya que lució como un equipo desentendido y sin estabilidad a pesar de ya haber sido tomado por el propio José Manuel De la Torre.
No hubo poderío mexicano que apareciera para nivelar las acciones, incluso Rafael Márquez Lugo tuvo dos claras de gol que no supo resolver, sin embargo el primer tiempo se salvó al minuto 45.
Los mexicanos igualaron el parcial antes de irse al descanso por vía de Marco Fabián, quien recibió un pase largo de Israel Jiménez dentro del área para bajar la pelota y puntearla al fondo de la red.
En la parte complementaria “Chepo” hizo dos ajustes: sacó a Alejandro Castro y Jair Pereira para buscar una mejor idea con Juan Carlos “Topo” Valenzuela y Carlos “Gullit” Peña. Tal vez mejoró el funcionamiento pero no el resultado.
Apenas iniciada la parte complementaria llegó el segundo gol panameño. De nuevo Torres se encontró el marco, esta vez en jugada de pizarrón al empujar el balón al primer poste, para convertirse en el primer panameño en la historia que le anota más de un gol a México.
Aunque los mexicanos mejoraron su despliegue futbolístico, ese desempeño no les alcanzó para nada, teniendo que conformarse con la derrota que les ocasiona caer al fondo del grupo donde incluso, Martinica ya sumó sus primeros tres puntos al derrotar a Canadá.
Precisamente los de la Hoja de Maple son el próximo rival de una Selección Mexicana que llegará a este compromiso del jueves con muchos más nervios, más presión y en un medio ambiente, que aunque se quiera negar, está lleno de incertidumbre.
