Iván Alonso fue muy claro al asegurar que no tiene ningún problema del corazón que le impida seguir jugando al futbol, pero reconoció que por recomendaciones médicas, podría dejar a los
Diablos Rojos del Toluca para alejarse de la altura de la ciudad.
“Dijeron que me desmayé en Acapulco y que por eso se me realizó una operación. No tengo nada en el corazón, no estoy enfermo”, dijo al programa Raza Deportiva de ESPN.
“Me hice unas pruebas a causa de la altura, los médicos me hicieron la recomendación de no jugar en la altura”, añadió el delantero.
Alonso explicó que el cateterismo que se le realizó fue para descartar cualquier tipo de problema para su vida normal y después pensando en su futuro profesional.
El martes realizará una prueba de esfuerzo, pero aclaró que puede seguir jugando al futbol, aunque podría ser en un equipo distinto al Toluca.