La Federación Internacional de Atletismo (IAAF) alegó que Caster Semenya es “biológicamente un hombre” y que esta es la razón por la que debe reducir el nivel de testosterona que produce para poder competir en certámenes femeninos, de acuerdo con unos documentos publicados por primera vez por el máximo tribunal del deporte.
La postura de la IAAF en cuanto a Semenya y otras atletas que se han visto afectadas por estas nuevas regulaciones respecto a los niveles de testosterona fue revelada en el fallo del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), donde la sudafricana se enfrentó a la IAAF por sus normas de hormonas polémicas en una audiencia privada que duró cinco días en febrero.
Los documentos publicados mostraron que la IAAF se refirió a la dos veces campeona olímpica en la prueba de 800 metros como una de varias “atletas biológicamente masculinas con identidades de género femenino”.
Francine Niyonsaba de Burundi y Margaret Wambui de Kenia, han dicho que también se vieron afectadas por las nuevas normas. Ellas también han arremetido contra las regulaciones y criticado a la IAAF
Semenya, que ha sido identificada legalmente como mujer durante toda su vida, apeló el veredicto del TAS en el máximo tribunal de Suiza bajo motivos de derechos humanos. Ganó un fallo que suspendió temporalmente las regulaciones respecto a los niveles de testosterona.
