Christian Horner, jefe de Red Bull que afronta investigaciones de la empresa de bebidas y de la F1 por presunto comportamiento inapropiado, estuvo presente en el comienzo de los entrenamientos de pretemporada de la Fórmula 1.
Horner acompañó al jefe de tecnología del equipo, Adrian Newey, cuando Max Verstappen condujo el nuevo monoplaza de la escudería, el RB20, en la sesión matutina del miércoles.
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— Oracle Red Bull Racing (@redbullracing) February 21, 2024
Fue el inicio de la campaña para el joven piloto neerlandés, quien buscará su cuarto título mundial seguido.
El pasado 5 de febrero, la matriz de Red Bull que abrió una investigación sobre las acusaciones de conducta inapropiada formuladas por una empleada del equipo.
Horner ha negado haber cometido un acto indebido y ha continuado en sus funciones de jefe mientras se investiga.
Jefe de Mercedes pide transparencia en la investigación
Ante el hecho, el jefe de Mercedes, Toto Wolff, pidió transparencia en la investigación.
“La F1, y lo que hacen los equipos, defendemos la inclusión, la igualdad, la equidad, la diversidad”, dijo Wolff en el día de pruebas. “No se trata sólo de hablar de ello, sino de vivirlo día a día”
“Creo que lo Red Bull ha iniciado como una investigación independiente, si se hace de una manera correcta, con transparencia y con ese rigor, creo que tendremos que prestarle atención“.
En la pista del circuito de Sakhir, Red Bull marcó la pauta durante la primera sesión. Max fue un segundo más rápido que el resto y completó 142 vueltas.