Checo Pérez busca cerrar la temporada 2024 de la Fórmula 1 como la inició, cerrando los fines de semana en los podios, algo que podría lograr gracias a que el equipo ya sabe qué pasó con las actualizaciones de que les hicieron a los Red Bull.
El de Guadalajara aprovechó las vacaciones para descansar y dejar a un lado la mala racha por la que pasó las últimas carreras antes del parón veraniego.
“Básicamente me fui y desconecté. Pero siempre, cuando estás en las vacaciones de verano, la parte de atrás de la mente está siempre en contacto con los ingenieros y lo que está pasando”, dijo Pérez este jueves ante los medios de comunicación.
“Diría que ha sido una pausa muy positiva para Red Bull. Hemos sido capaces de encontrar un montón de cosas. Creo que al menos sabemos dónde estamos con el coche en este momento. Ya sabes, ha habido una actualización o dos que probablemente nos llevó por el camino equivocado. Creo que mirando hacia atrás, en este momento sabemos exactamente cómo está funcionando el coche, que es una cosa muy buena, porque creo que no estaba tan claro en las últimas carreras. Si podemos arreglarlo y volver al nivel que teníamos antes, esa es otra cuestión. Pero creo que en ese sentido es muy positivo”, agregó.
Si bien el piloto de Guadalajara no espera haber encontrado una solución mágica, sí piensa que se encontrará con un monoplaza más a su gusto conductivo y del que pueda sacar más provecho.
Todo puede tardar
Pérez sabe que no hay soluciones mágicas, pero piensa que podrá encontrar algo nuevo que le funcione para sacar provecho y recuperar el ritmo del top 3.
“Sí, creo que sí. Creo que especialmente con los problemas que hemos tenido, he estado luchando en esa dirección. Obviamente, no puedo entrar en demasiados detalles, pero muchos de mis problemas han ido en esa dirección. Es difícil de explicar la cantidad de detalles, pero no es que en el comienzo del año yo era mucho mejor piloto de lo que soy ahora, ya sabes. Así que ciertamente ha habido algunas cosas que no salieron a mi manera que me estaban perjudicando más, y probablemente no estábamos extrayendo el máximo del coche en ese sentido”, aseguró.
Checo fue contundente a que ya encontraron el problema, pero que las soluciones podrían llevar tiempo para ser implementadas.
“Definitivamente probaremos muchas cosas para intentar arreglarlo. Sin duda hay algo que hemos tomado en la dirección equivocada, pero obviamente no es tan fácil de arreglar ni tan rápido. Todo lleva su tiempo y, obviamente, con la falta de práctica a la que podríamos enfrentarnos y los diferentes tipos de circuitos que se avecinan, no es tan sencillo”, dijo.
El mexicano agregó que Red Bull deberá “hacer concesiones” con el coche mientras espera por actualizaciones que mejoren el comportamiento del monoplaza, pero indicó que lo más destacado para él es el conocimiento que se tiene ahora.
“Vamos a estar comprometiendo un poco aquí y allá, pero no estoy demasiado preocupado. Creo que lo más importante para nosotros es que entendemos dónde estamos en términos de la cuestión, y entonces podemos ir desde allí”.