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"Nos marcamos la meta de acabar entre los cuatro primeros de cualquier torneo oficial en el que participemos, pensando que eso nos da la posibilidad de ser primeros"
“Somos una generación diferente. Estábamos motivados cuando vinimos para acá. No sentíamos necesariamente esa responsabilidad, sino más bien el prestigio de que nuestro país había ganado el título y teníamos que dar lo máximo para defenderlo”
Cuando México estaba en la tanda de los penales contra Brasil, como aficionado mexicano cualquier pensamiento relacionado a la derrota pudo haber pasado por la mente.
Esas frases que tantas veces hemos escuchado como “Jugamos como nunca, perdimos como siempre”, o “Malditos penales” han llenado de terror a generaciones completas de seguidores mexicanos en etapas cruciales. Pero a esta Selección Mexicana Sub 17 no le sucedió lo mismo y su historia cambió.
La idiosincrasia del mexicano no pudo generalizarse en este equipo de menores que cargados de sueños, inocencia y hambre de triunfo, le han demostrado al mundo que México puede estar en el mapa del éxito.
Después de empatar 1-1 en los 90 minutos reglamentarios, al Tri juvenil no le dio miedo tirar los penales. Se mantuvo firme pese a ir abajo en la tanda, para luego empatarle al finalizar los 10 tiros. La gran actuación del guardameta Raúl Gudiño fue sobresaliente, al atajar dos disparos claves de Brasil y así darle a México la antesala por el título.
En esto, Raúl “Potro” Gutiérrez tiene su mérito. Hace cuatro años fue el técnico que se encargó de llevar al Tricolor al oro en el mundial de la misma categoría. Julio Gómez, Jorge Espericueta, Carlos Fierro y el resto de los chicos hicieron vibrar al país entero luego de vencer a la canarinha en el estadio Azteca para ganarse el respeto merecidamente.
“Somos una generación diferente. Estábamos motivados cuando vinimos para acá. No sentíamos necesariamente esa responsabilidad, sino más bien el prestigio de que nuestro país había ganado el título y teníamos que dar lo máximo para defenderlo”, contó el guardameta Raúl Gudiño.
Hoy, en una nueva edición de la justa mundialista, México está decidido a buscar de nuevo esa hazaña frente a otro rival sudamericano.
Como a Brasil o a España, el respeto a Argentina es común en el futbol, pero el Tri menor también tiene sus méritos para querer entrar en el selecto grupo de los rivales de miedo cuando disputen la semifinal del Mundial Sub 17 de Emiratos Árabes Unidos.
Tras eliminar a la verdeamarelha en muerte súbita dentro de la fase de cuartos, ahora la Selección Nacional juvenil está preparada para hacer historia y cobrar venganza de lo que hace 10 años la albiceleste les propinó en Finlandia 2003.
Los aztecas fueron presa fácil de los pamperos por marcador de 2-0 en una fase de cuartos, por lo que ahora que se ven de nuevo las caras, la lucha por llegar a la final será complicada para ambos equipos.
El presente para México tiene privilegios. Los rivales le siguen llamando campeón y lo ven como aspirante serio tras haber eliminado al poderoso Brasil, sin embargo Argentina también tiene mejores cifras al ataque con 12 goles a favor, mientras que el Tri tiene ocho tantos.
Iván Ochoa, Ulises Jaimes y Alejandro Díaz son las armas de la ofensiva tricolor, para buscar cobrar venganza de los argentinos que hace una década hicieron sufrir al cuadro mexicano.
Ayala, relevo de Mier
Luego de la baja por lesión de Hiram Mier, la Dirección de Selecciones Nacionales informó que el defensa de Tigres, Hugo Ayala, fue llamado para ocupar este sitio en la Selección Mexicana de Miguel Herrera, de cara a los partidos de repechaje ante Nueva Zelanda.
