La temporada 2020 marcó el fin de una era para el Sur de la Conferencia Nacional. Tras cuatro años consecutivos como campeones divisionales, los Saints han cedido el trono a los vigentes campeones de la NFL y todo indica que este 2021 nadie podrá hacerle sombra a Tom Brady y Tampa Bay en esta división.
Si bien, New Orleans es el actual campeón de la división, en los Playoffs, los Buccaneers pusieron orden y los eliminaron en el Juego Divisional. Y así, mientras los dirigidos por Sean Payton se iban frustrados por no llegar al Super Bowl una vez más, Tampa Bay avanzaba y, más tarde, se haría del trofeo Vince Lombardi.
En cuanto a Atlanta y Carolina, solo se puede decir que lucharán una vez más por no tener la deshonra de ser el último lugar de una división que junto con el Sur de la Conferencia Americana podrían ser los dos sectores más débiles de la NFL.
Saints caídos en desgracia
La temporada pasada marcó el final de laera del legendario Drew Brees y su lugar será ocupado por el multifacético Taysom Hill, quien lo mismo era utilizado como quarterback que como ala cerrada o corredor.
Ahora, Hill, con sólo 134 intentos de pase en cuatro temporadas, tomará el control de una ofensiva que con Brees era explosiva y temida. Pero no más.
El coach Sean Payton le dio la oportunidad a Hill; sin embargo, si no responde rápidamente, el veterano Jameis Winston podría hacer acto de presencia e incluso el novato Ian Book podría también alzar la mano.
En 2020, Hill comenzó cuatro juegos para los Saints y tuvo marca de 3-1 como titular, pero ni él (10 balones sueltos en 2020) ni Winston (30 intercepciones en su último año como titular en Tampa Bay) se encargan del balón tan bien como Brees.
Y para este año no sólo sufrirán por el retiro de Brees, sino por las partidas de Emmanuel Sanders, Janoris Jenkins, Jared Cook, Trey Hendrickson y Alex Anzalone.
De esta manera, los Saints inician una nueva era donde incluso terminar con récord ganador luce muy complicado. Disfrutaron de muchos años en la élite, pero sólo les alcanzó para ganar el Super Bowl XLIV, hace más de 10 años.
Brees no era eterno y ahora son “santos” caídos en desgracia.
Lejos de volar alto
Los Falcons viven un periodo de transición. Tras la salida de Dan Quinn y la llegada de Arthur Smith como entrenador en jefe, parece que la reconstrucción debería comenzar.
Y el primer paso que dieron es en el ataque aéreo. Sí, se mantiene el quarterback Matt Ryan, pero Julio Jones se ha ido y el peso aéreo recaerá en Justin Gage y para rejuvenecer el área reclutaron en el Draft al ala cerrada Kyle Pitts.
Pero el problema fue la defensiva, que ocupó la posición 29 en yardas permitidas la temporada pasada y no mejoraron mucho para este año con la agencia libre, pues es difícil emocionarse con las adiciones de Mike Davis, Brandon Copeland y Barkevious Mingo.
Así, los Falcons, que tuvieron una temporada de 4-12, con grandes problemas defensivos, contrataron a un entrenador en jefe con mentalidad ofensiva, seleccionaron otra arma ofensiva e hicieron poco en la agencia libre que pudiera verse como positivo.
Así, una verdadera reconstrucción deberá esperar.
Tampoco rugirán con Darnold
De una forma u otra, se descubrirá de qué está hecho el quarterback Sam Darnold en 2021. Al menos, está obligado a lucir más que en los Jets, pues Carolina intercambió tres selecciones de Draft (incluida una segunda y cuarta ronda en 2022) por el ex mariscal de campo de Nueva York.
Sin duda, Darnold encontrará mayor talento en Carolina que en su equipo anterior.Tendrá al lado a uno de los mejores corredores en Christian McCaffrey, una estrella emergente en D.J. Moore y un novato seguro en Terrace Marshall Jr.
Lo que podría no ser mejor es la línea ofensiva.Taylor Moton, un fuerte tackle derecho, fue el mejor del departamento, pero no es de élite. Y para complicar más las cosas el guardia derecho John Miller no estará presente en el primer juego de temporada debido a que dio positivo por COVID-19.
A la defensiva, la juventud es el elemento distintivo.
Si Darnold puede jugar bien y si la joven defensa puede mejorar desde el puesto 24 en eficiencia, los Panthers podrían dejar en el sótano a los Falcons y ganar un juego más que en 2020.
