Beijing 2022: Terminan unos juegos memorables y altamente vigilados

Beijing 2022: Terminan unos juegos memorables y altamente vigilados

La justa bajó el telón y le pasó la estafeta a Milán. Será recordada por la polémica suscitada con Kamila Valieva, así como la histórica participación de Donovan Carrillo

Un escándalo en el patinaje artístico protagonizado por Kamila Valieva; Eileen Gu, ahora es una campeona china que creció en California, Mikaela Shiffrin, la estrella estadounidense del esquí alpino se fue con las manos vacías y un mexicano, Donovan Carrillo, fue el primer latinoamericano en un programa libre. Todo ello, dentro de un “circuito cerrado” anti COVID-19 orquestado por el gobierno de China.

Esos fueron los puntos destacados de los Juegos de Invierno en Beijing 2022, los cuales llegaron este domingo a su fin, coronando un trío de justas olímpicas en Asia, para ahora irse a Occidente hasta por lo menos 2030.

Fueron unos Juegos muy vigilados celosamente, la única manera que la China del presidente Xi Jinping podría organizarlos. La “burbuja” mantuvo apartados a sus participantes del resto de la ciudad anfitriona, y por extensión al resto del mundo que observaba.

La noche del domingo, Xi y el presidente del Comité Olímpico Internacional Thomas Bach entregaron la estafeta a Milán-Cortina, la sede de los Juegos de Invierno 2026.

A diferencia de la primera cita pandémica en Tokio el pasado verano boreal, que se escenificó casi sin público en ambas ceremonias, una modesta pero ruidosa cantidad de espectadores se dispersó por las butacas del “Nido”, el Estadio Olímpico de Beijing.

A decir de los datos fríos, estos Juegos fueron un éxito: muy seguros, también cayó nieve, artificial en gran medida y algo de la auténtica. Las sedes como el Nido y el Centro Acuático, legado de los Juegos de Verano de 2008 en Beijing, cumplieron con las expectativas.

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Asimismo, los índices de teleaudiencia siguieron a la baja, pero los números de streaming aumentaron.

No se registraron mayores problemas logísticas, salvo los creados deliberadamente para impedir la propagación del COVID en el país donde el coronavirus surgió por primera vez hace más de dos años.

Y lo controló. Cumplido el sábado, el circuito que transformó a Beijing en dos ciudades, una cerrada y otra que seguía con normalidad, reportó apenas 463 casos positivos entre miles de personas que ingresaron a la burbuja desde el 23 de enero.

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