Solo el basquet pudo unirlos
Desde niños los hermanos Girón tomaron diferentes caminos, uno por México y otro por Panamá, pero los Capitanes de la Ciudad de México lograron que tengan un solo objetivo: el título
Manuel CuéllarLos Capitanes de la Ciudad de México lograron una situación que ni su familia pudo: poner de acuerdo y defender al mismo equipo a los hermanos Girón, quienes tienen la misma sangre pero siempre se han caracterizado por su rebeldía y su diferencia en gustos.
Los distintos caminos se comenzaron a bifurcar desde niños, y no solo en los deportes, sino también en sus preferencias nacionales, pues aunque ambos nacieron en Monterrey, uno juega para México y el otro representa a Panamá.
“Mi hermano mayor, Gabriel, y yo nacimos en Monterrey, pero cuando yo tenía tres años nos fuimos a vivir a Panamá, y allá crecimos, nos criamos, pero regresamos a México para terminar nuestros estudios, pero creo que ya desde niños, cada quien tenía decidido a que país representar”, explica a Reporte Indigo Daniel Girón, quien es parte del equipo nacional del país centroamericano.
En su caso, el menor de los hermanos indicó que crecer en un país como Panamá, donde vivió la cultura de cerca, fue lo que influyó en su decisión de jugar para los ‘canaleros’, además de sus gustos personales como la comida, pues aunque ama el sazón mexicano, el arroz con coco y los patacones son lo que más extraña cuando está lejos de su tierra.
“En lo personal, mis gustos son más panameños, ejemplo con la música, la banda no me gusta mucho, me gusta más la música de allá (de Panamá) como el reggae, la salsa, pero algo que nunca voy a perder es el amor por la comida, el arroz con coco, pescado frito, patacones. La comida mexicana me gusta, pero cuando estoy acá si extraño muchísimo la comida de allá”, agrega el jugador de Capitanes.
Mientras que para su hermano Gabriel la historia es diferente, a pesar de que también creció en el Caribe, siempre ha estado apegado y agradecido con las oportunidades que ha tenido en México, ya que fue en tierras nacionales donde debutó como profesional, así como terminar sus estudios.
“Cuando me dijeron que estaba entre los 12 Guerreros, tuve la oportunidad de elegir, pero no lo pensé y dije: ‘de aquí soy’, porque la verdad nací en Monterrey y estamos muy arraigados aquí en México, y gracias a Dios se me da esa oportunidad y es la mejor oportunidad que he tenido a mi vida”, relata Gabriel.
Cambiaron la jugada
Pero el no coincidir en la nacionalidad es sólo una parte de la ‘rebeldía’ que los Girón tienen en su familia, ya que en los estudios también existió el llevar la contraria a sus padres, debido a que como su papá es médico, todos esperaban que alguno de ellos siguiera sus pasos, pero le cambiaron la jugada a su progenitor estudiando carreras diferentes.
“Mi papá es médico y el pensó que iba a estudiar medicina y no fue así, a mí el Comercio Internacional siempre me ha llenado y me a gustado mucho como el basquet, a tal grado que yo sigo leyendo libros sobre lo que estudié para mantenerme informado, actualizado y no dejarlo de lado”, indica Gabriel.
Su hermano también se inclinó por otra rama y al momento de entrar a la universidad no siguió los pasos de su padre, ni mucho menos los de su hermano, y como estaba muy metido en el basquetbol escogió una carrera relacionada a su profesión.
“Mis estudios también son diferentes a los de mi hermano y mi papá, yo estudié la carrera de Cultura Física y Deporte, porque me gusta mucho el deporte, y lo vi como una imagen para mí, que me puede ayudar en otros aspectos de mi carrera”, manifiesta Daniel.
Impulsan el deporte
El estar unidos por el basquetbol, provocó que Daniel y Girón emprendieran un proyecto juntos en su natal Monterrey, donde pusieron una academia de baloncesto para apoyar el talento nacional, pues quieren impulsar a los jóvenes con talento.
“Es un proyecto que tenemos mi hermano y yo, y un compañero. Más que nada es un sueño que ya teníamos desde hace mucho, y bueno apenas llevamos dos años, pero vamos bien, porque la idea es apoyar el deporte en Monterrey y dar ese plus que ninguna otras escuelas o academias tienen”, dijo Daniel Girón.