Lance Armstrong tomó la iniciativa de denunciar a la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA) con el propósito de detener el proceso en su contra por supuesto consumo de sustancias ilegales.
El ex ciclista y siete veces ganador del Tour de Francia, hizo público el inicio del proceso en su portal de Internet, el cual sustenta en razón de sentir violación a los derechos de un juicio justo y porque la agencia no tiene jurisdicción en su caso.
Dentro de las afirmación de Armstrong, se señala que el director ejecutivo de la USADA, Travis Tygart, tiene intenciones de vengarse de él, que no es imparcial ni persigue la verdad, por lo que esperará que los tribunales lleguen a respetar las normas constituciones del caso.
“El proceso que (USADA)quiere hacerle por la fuerza a Lance Armstrong no es justo y no tiene por objetivo de buscar la verdad.
“Confiamos en que los tribunales continuarán asegurándose de que se respetan las normas constitucionales del debido proceso, diseñadas para proteger los derechos de atletas limpios y con integridad en el deporte”, señala el comunicado.
El pedalista alega su inocencia y niega categóricamente haberse dopado después de pasar más de 500 controles. Pese a esta declaración, la Agencia afirma que tiene más de una decena de ex compañeros y directivos dispuestos a declarar en contra de él.
Entre los acusados junto al estadounidense se encuentran también los médicos españoles Pedro Celaya Lezema y Luis García del Moral, así como el entrenador Pepe Martí.
De encontrársele culpable, Lance Armstrong podría ser despojado de todos sus triunfos del Tour de Francia.