El jugador iraní Amir Nasr Azadani se ha salvado de morir ejecutado por el gobierno de su país, tras unirse a las protestas a favor de los derechos humanos y de las mujeres, por lo que solo será enviado a la cárcel, pero tendrá que pagar una condena de 26 años en la capital del país, Teherán.
Su caso tomó mucha relevancia y causó mucha conmoción durante el Mundial de Qatar 2022, pues varias figuras del futbol, organizaciones y medios de comunicación se unieron para alzar la voy y presionar para que la República Islámica modificara la sentencia. Cabe destacar que el futbolista había participado en apoyo a Mahsa Amini, quien recibió la pena de muerte al no seguir los “códigos de vestimenta”, tras portar mal el velo al caminar por la calle.
Azadani ha sido señalado por incurrir en varios delitos, entre los que destacan el alterar el orden público, reunirse y conspirar para vulnerar la seguridad del país, además de ser acusado por crímenes contra Dios. Asimismo, se le acusa por el asesinato de tres miembros de las fuerzas de seguridad iraní.
Por ahora, las autoridades en el país han ejecutado a cuatro personas que han sido acusadas de participar en protestas. Entre los deportistas que ya han recibido la pena de muerte, están el joven luchador profesional Majid Reza Rahnavard, quien también se unió a las demandas por los derechos humanos y fue condenado a la horca. Se le acusó de haber acuchillado a un agente de seguridad.