La prueba tiene un costo de 399 dólares. Foto: iStock

Quest Diagnostics lanza prueba de sangre para detectar Alzheimer

Los tratamientos anteriores para el Alzheimer solo han tratado los síntomas, pero no han abordado la enfermedad subyacente

Quest Diagnostics lanzó el primer análisis de sangre para detectar niveles anormales de beta amiloide, una proteína clave del Alzheimer que puede aparecer años antes de que surjan los síntomas de la demencia.

La prueba de llamada AD-Detect ya está a la venta al público en general, tiene un costo promedio de 399 dólares y utiliza la misma tecnología que una prueba de sangre que la compañía lanzó para que la usaran los médicos a principios de 2022.

'Una de las ventajas de hacerse una prueba de amiloide es que le permite saber, potencialmente con años de anticipación incluso a los síntomas, que está en riesgo de tener Alzheimer', dijo el Dr. Michael Racke, director médico de neurología de Quest.

El anuncio sigue a la aprobación regulatoria de Estados Unidos, mientras que la Administración de Drogas y Alimentos de aquel país también está revisando un tratamiento similar de Eli Lilly llamado donanemab.

Los tratamientos anteriores para el Alzheimer solo han tratado los síntomas, pero no han abordado la enfermedad subyacente.

La prueba para consumidores de Quest está dirigida a adultos mayores de 18 años que pueden tener una pérdida leve de la memoria o antecedentes familiares de Alzheimer y desean comprender su propio riesgo de contraer la enfermedad, dijo Racke.

Los usuarios primero deben pagar por la prueba en el sitio web de Quest. Luego, Quest programará una cita con un médico de telemedicina para solicitarla en su nombre. Si la prueba es positiva, un médico de una red de médicos independientes se comunicará con las personas para analizar los próximos pasos y, potencialmente, compartir los resultados con otros médicos, dijo la compañía.

La prueba desarrollada en el laboratorio de Quest, creada y realizada en un solo laboratorio, no ha pasado por ninguna revisión de la FDA. Por lo general, la agencia no revisa dichas pruebas siempre que sean recetadas por un proveedor de atención médica.