La impresora ya se probó con en las vacunas de Pfizer y Moderna, pero el objetivo es que se pueda adaptar a cualquier vacuna. Foto: Pexels

Desarrollan impresora portátil para producir parches miniatura para administrar vacunas

Científicos del MIT desarrollaron una impresora portátil para producir parches miniatura para administrar vacunas

Un equipo de científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) desarrolló una impresora portátil que es capaz de producir parches miniatura para administrar vacunas de ARNm contra el COVID-19.

El dispositivo imprime parches de dos centímetros de ancho que contienen cientos de diminutas agujas que administran una vacuna cuando se presionan contra la piel.

Estos parches tendrían varias ventajas sobre las inyecciones tradicionales; administrarse sin dolor y conservarse a temperatura ambiente durante largos periodos.

El equipo del MIT ya probó la impresora con las vacunas de Pfizer y Moderna, de acuerdo con un estudio publicado en la revista Nature Biotechnology, pero el objetivo principal es que se pueda adaptar a cualquier vacuna.

Ana Jaklenec, coautora del estudio, comentó que la impresora podría enviarse a zonas como campos de refugiados o a lugares remotos para “inmunizar rápidamente a la población local”, en caso de un nuevo brote de una enfermedad como el ébola.

Impresora portátil representaría un verdadero avance científico

La tinta de la vacuna está formada por nanopartículas que contienen moléculas de la vacuna de ARNm, así como un polímero similar al agua azucarada. Una vez secos, los parches pueden almacenarse a temperatura ambiente durante al menos seis meses. El estudio señaló que los parches sobrevivieron un mes a una temperatura de 37 grados centígrados.

La impresora fabricaría 100 parches en 48 horas, no obstante, los modelos sugieren que, con mejoras, podría imprimir miles al día, señalan los investigadores.

Antoine Flahault, director del Instituto de Salud Global de la Universidad de Ginebra, afirmó que la producción y el acceso a las vacunas podría “transformarse gracias a una impresora de este tipo”. “Convertirse en un verdadero avance”, pero advirtió de que ello depende la aprobación y la producción masiva, lo que llevaría años.

El estudio fue probado en ratones, a los que se les administró un parche con la vacuna produjeron un nivel de respuesta de anticuerpos similar al de otros inmunizados mediante una inyección tradicional. Los parches impresos se están probando actualmente en primates, de tener éxito, conduciría a los ensayos en humanos.