Un estudio señala que “si Latinoamérica pudiera definir y aplicar estándares para la producción de minerales estratégicos de manera social y ambientalmente responsable, se aseguraría una ventaja comercial en los mercados emergentes para estos minerales”. Foto: Pexels

Litio y cobre fomentarán inversión para la transición energética en LATAM

El director general de Canning Hous, Jeremy Browne destacó que, pese a los desafíos políticos y sociales, “Latinoamérica sigue siendo una región con un enorme potencial comercial”

De acuerdo con un informe, la minería de litio y cobre, minerales básicos para la transición energética, son uno de los principales incentivos para la inversión en Latinoamérica en las próximas décadas.

De acuerdo con EFE, las perspectivas LATAM 2024, auspiciado por el centro de estudios Canning House, conocido como la Casa de Latinoamérica en la capital británica, analiza la situación política, económica, social y medioambiental de la región, actualmente algo “relegada” en las prioridades del Reino Unido.

El consejero delegado, Jeremy Browne, reconoció en una entrevista con la agencia que este país, y las potencias occidentales en general “debería hacer más” para aumentar su presencia en Latinoamérica, donde China pasó de un comercio bilateral por 12,500 millones de dólares en el 2000 a 450,000 millones en 2021.

“Entiendo que el Reino Unido tiene varios frentes abiertos -Ucrania, Israel y Palestina, el crecimiento de China, Brexit…- y es fácil relegar a Latinoamérica, pero creo que es un error, porque hay muchas oportunidades de colaboración y prosperidad conjuntas”, afirma.

Aunque el informe admite que los países latinoamericanos afrontan aún retos en sus democracias y estabilidad social, también destaca su potencial para “desempeñar un papel comercial clave” en la transición hacia las energías renovables y la lucha contra el cambio climático.

En este sentido, los autores señalan que, “si Latinoamérica pudiera definir y aplicar estándares para la producción de minerales estratégicos de manera social y ambientalmente responsable, se aseguraría una ventaja comercial en los mercados emergentes para estos minerales”.

Si así fuera, “puede emerger como un líder global en el esfuerzo por responder a los desafíos comunes en materia de biodiversidad y clima”.

“Latinoamérica es un aliado indispensable”, aseguró Browne, que de 2010 a 2012 fue secretario de Estado para Latinoamérica del Gobierno británico.

“Es el custodio del Amazonas, líder mundial en el uso de fuentes de energía sin carbono y la fuente de gran parte del litio y el cobre que se necesitarán para impulsar la transición energética verde”, declara.

Destacan que “LATAM es una región con un enorme potencial comercial”

Según el informe, se calcula que la región posee más de la mitad de las reservas mundiales de litio, alrededor del 40 por ciento de cobre y plata y una cuarta parte del níquel.

Por otra parte, es el mayor exportador neto de alimentos del planeta, se estima que representará el 18 por ciento de todas las exportaciones alimentarias en 2031 y una fuente de importante producción adicional de petróleo y gas.

Pese a resaltar estas oportunidades para los inversores, el informe también avisa de los riesgos, como el alto índice de criminalidad y corrupción en algunos países, el autoritarismo o la agitación social, si bien remarca que en general hay “democracias genuinas”.

“Latinoamérica abraza, en gran medida, la iniciativa empresarial, la creación de riqueza y el comercio”, sostiene el “Latam Outlook 2024”, a pesar de que algunos lugares “mantienen un apetito reflejo por una improductiva intervención del Estado”.

Por países, predice que, en Argentina, Javier Milei tendrá dificultades “para introducir su agenda de cambios”, mientras que el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afronta el reto de “equilibrar demandas políticas y financieras divergentes”. De acuerdo con este informe, “la desilusión y la polarización” aumentan en Chile.

Sobre Colombia, los autores dicen que “sigue siendo un destino atractivo y estable para las empresas”, estimuladas por “sus abundantes recursos naturales, sus sólidas políticas macroeconómicas y sus instituciones democráticas”, aunque persiste la inseguridad ciudadana.

Browne concluye que, pese a los desafíos políticos y sociales, “Latinoamérica sigue siendo una región con un enorme potencial comercial”.

“Su creciente clase media, los 650 millones de habitantes, la necesidad que tiene de invertir en proyectos a gran escala y su aprecio por los expertos internacionales significan que América Latina está abierta para los negocios”.