Este 14 de febrero, se conmemora el “Día Mundial de la Energía”, en este contexto, Énestas presentó un análisis sobre el papel del gas natural en América Latina, donde México, es uno de los mayores consumidores de la región y se perfila para ser uno de los principales países exportadores en los próximos años.
En América Latina el gas natural representa el 23.4 por ciento de la producción de energía primaria. Uno de sus principales usos es la generación de electricidad para satisfacer las demandas industriales de la región. Este combustible tiene un mejor rendimiento energético frente a otros.
México, Argentina y Brasil lideran el consumo de gas natural, al abarcar cerca de dos tercios del uso total en América Latina y el Caribe.
El gas natural ha desempeñado un papel importante en la implementación de la transición energética en Latinoamérica gracias a sus bajas emisiones de gases de efecto invernadero.
Se estima que supere el uso del carbón y sea el combustible más utilizado hacia el 2040. Además, en su formato “líquido o licuado” es la forma más eficaz de hacerlo llegar a todas aquellas zonas de la región que no tengan acceso a gasoductos. Lo cual, asegura el suministro y distribución e impulsa el desarrollo económico de los países.
En el caso de México, de acuerdo con la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), se estima que para el 2024 la producción del gas natural sea de 4,083 millones de pies cúbicos diarios (MMPCD), mientras que las importaciones lleguen a 6,742 MMPCD.
