Para aclarar paradas, quienes organizaron el Chapotur para algunos selectos medios de comunicación, otorgando la primicia a cadenas de televisión extranjeras, no fue la procuradora Arely Gómez sino el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong. Desde Bucareli se manejaron las estrategias de comunicación que le dieron un trato muy disparejo a la prensa, la radio y la televisión en lo que sería la primera visita del controvertido túnel. Pero no faltó quien quisiera endosarle el descalabro a la PGR. Así que sale lo anterior para no dejar un erróneo sabor de boca.

En la rueda de prensa que dieron los titulares de PGR y Segob quedó claro que se harían públicos los vídeos de la última vez que se vio al narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán. Y también de las condiciones del afamado túnel por el que se escapó el narcotraficante.

El Presidente Nacional del Partido Acción Nacional, Gustavo Madero, salió dando duro y a la cabeza.

Él ya pidió la renuncia del titular de la Secretaría de Gobernación, del CISEN y de la Comisión Nacional de Seguridad.

Madero, quien ha envuelto a su partido en la peor crisis de credibilidad, fue enfático y dijo que esas renuncias son necesarias por la fuga del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera alias “El Chapo”.

Desde París el Presidente Enrique Peña Nieto dijo lo que todos sienten: la fuga del Chapo Guzmán es una afrenta al sistema político mexicano. Pero también es la demostración de que los penales de máxima seguridad no son de máxima seguridad y es la muestra de que el dinero puede corroer a cualquier institución del estado mexicano. Lo más curiosa es que las reacción de los ciudadanos que ante la fuga de uno de los criminales más buscados de la historia son encontradas.

Pues el gobernador de Michoacán, Salvador Jara, asegura que no hay Blancos de Troya, que no existe un nuevo grupo de autodefensa, que en el estado todo está en paz y se está resolviendo la inseguridad. Los michoacanos quedaron atónitos con los dichos de su mandatario. Pero más impresionados quedaron los agentes del CISEN y de la Policía Federal que trabajan de manera preventiva por si el grupo rebelde actúa de manera sorpresiva. Es decir, todos saben que ahí están pero el Gobernador declara que no es cierto. ¿A quién creerle? Vaya paradoja a la que se enfrentan los michoacanos.