“Si la montaña no viene a mi, yo voy a la montaña”, el mantra inmortal de Mahoma nos ha dejado lapidado a través de los siglos el pensar de otro precepto religioso: “La fe mueve montañas”.
La lucha de cultos es lo que ha mantenido en disputa al mundo que busca tener la última palabra en la razón de ideologías.
Y es que todo se resume a algo tan sencillo, el sentido existencial de tres preguntas básicas ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿Hacia dónde vamos?
Hidalgo Neira