Cuando mis tías decían que tener un perro era la solución a todas las alergias (sobre todo si era de la raza Chihuahua), creía que solamente era una leyenda urbana.
Esa “leyenda” se sabe desde hace muchos años, pero esta semana se publicó un estudio en Pediatrics que dice que cuando un niño está rodeado de un perro al aire libre, durante su primer año de vida, se fortalece su sistema inmunológico.
Algunas de las infecciones que se pueden evitar están relacionadas a problemas en los oídos y respiratorios.
María Alesandra Pámanes