Eleanor Friedberger parece un personaje creado por el ingenio de Wes Anderson: anclada en la moda y la estética musical de la década de los 70, con un físico que bien podría encajar en una extraña –pero no tan disparatada– familia, resultado de la combinación de genes entre Patti Smith y Joey Ramone.
En su carrera como solista, la compositora y cantante de 36 años de edad transforma esta melancolía setentera en sonidos que nos hacen recordar a Donovan o Harry Nilsson, pero con un empuje más directo de rock pop.
Juan Antonio Zertuche