“Yo soy mexicano y solo espero que haya suficiente atención a todas las expresiones de la cultura mexicana que están sucediendo ahora mismo en el país (...)”, dijo Alfonso Cuarón tras ser galardonado con el Oscar a Mejor Director por  “Gravity”, sosteniendo también la estatuilla que obtuvo por Mejor Producción, por la misma película.

Alfonso Cuarón Orozco soñaba con ser astronauta. Hoy, después de 20 años de carrera, el realizador mexicano tocó las estrellas y viajó a los límites del cosmos de Hollywood, al convertirse en el Mejor Director por la cinta “Gravity”.

Y es que, pese a que no se trata de una producción mexicana, “Gravity” es un triunfo para el público mexicano y para todo aquel que, como Alfonso Cuarón, sueña con llegar a lo más alto de la galaxia cinematográfica.

Todos en la fila del cine conocían el final de la película y aún así la segunda parte de “Harry Potter y las reliquias de la muerte” recaudó más de 91 millones de dólares el día de su estreno en el 2011, según datos de Box Office Mojo.

En sus 19 semanas de exposición en salas de todo el mundo, la obra basada en el libro de J.K. Rowling ganó más de mil 300 millones de dólares. Nada mal para tratarse de una película  con un final conocido por gran parte del público.

Ellos son más de 6 mil artistas y profesionales que traen la magia del cine a la vida. Ellos son hombres y mujeres que transportan a las audiencias a las galaxias y mundos lejanos y que crean lo inimaginable para la gran pantalla. Ellos son prominentes miembros de la industria cinematográfica del entretenimiento. Ellos son los miembros de la Academia", dice el inicio de la sección de “Miembros”, del sitio oficial de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Norteamérica para dar a conocer a sus orgullosos integrantes.

Hay una relación ahí entre devoción y odio, porque es mucho el esfuerzo que tiene uno que hacer para tocar flamenco. La guitarra es un instrumento que nunca estás seguro cuando lo tocas, siempre estás vendido. Depende de tantas cosas: del estado de ánimo, del equilibrio emocional en ese momento... Para tocar muy bien o como una mierda", dijo en vida el magnífico guitarrista Paco de Lucía.