"Billy Elliot”. La cinta de aquel niño bailarín que enamoró al mundo entero en el 2000 es lo primero que se viene a la mente al pensar en el actor británico Jamie Bell.
Fue el personaje que llevó al entonces joven de 15 años a saltar a la fama, tras haber sido descubierto –fue elegido para el papel de Billy Elliot entre 2 mil niños– por el director del filme, Stephen Daldry, quien se convirtió en la figura paterna que el joven nunca conoció.
Eugenia Rodríguez