El conflicto por los parquímetros en San Pedro seguramente hoy llegará a su fin, y a pesar de todo lo que leas, solamente habrá un ganador en esta pelea: San Pedro Meters.

Los dueños de los parquímetros aceptarán rescindir este polémico contrato firmado por el exalcalde Mauricio Fernández a cambio de embolsarse 75 millones de pesos.

Nada mal para ellos, si se recuerda que cuando iniciaron las negociaciones con San Pedro la propuesta municipal rondaba por los 55 millones y los empresarios pujaban por 70 millones.

Bonito se le pondría al Gobierno del Estado que aquí los maestros de las secciones 21 y 51 empezaran a alborotarse con protestas y paros en escuelas.

Sin embargo, ya ayer el líder de la Sección 21, Casimiro Alemán, abrió la boca frente a la prensa. Dijo que hay dos escuelas, una Escobedo y otra más en Monterrey, que están en paro de labores.

El líder fue conminado por el propio gobierno estatal para ofrecer una rueda de prensa donde hablara de la paz que se vive en Nuevo León respecto a las reacciones a la reforma educativa.

El PRI y el PAN libran en Nuevo León una guerra de baja intensidad que se intensificará conforme lleguen las elecciones del 2015 por la gubernatura.

En esta lucha de poderes los panistas y priistas presumen una civilidad política y hay incluso gestos de buena voluntad, como la liberación de los permisos para el Metro que hizo esta semana la alcaldesa Margarita Arellanes.

Pero no nos engañemos: los tambores de guerra retumban fuerte, tanto en el palacio de cantera como en el palacio de cristal, y en la sede del PAN de Nuevo León.

Ugo Ruiz ya no ve la puerta con tantos problemas que le dejó la administración municipal de Mauricio Fernández en San Pedro.

Los parquímetros, los desarrollos ilegales, los edificios de seguridad, las alturas prohibidas son parte de las anomalías que heredó Fernández a la gestión de Ugo.

En los próximos días aparecerán más edificios en construcción autorizados durante el paso del exsecretario de Control Urbano Municipal sampetrino, Aldo Decanini.

A Enrique Ávila, secretario de Desarrollo Sustentable de San Pedro, no hay quien lo salve y su futuro está ya en manos del Ministerio Público Federal.

En los próximos días el alcalde Ugo Ruiz tendrá que tomar la decisión de destituir a su funcionario municipal quien enfrenta un proceso que lo puede llevar hasta la cárcel.

Como publicamos hace tres semanas en Reporte Indigo, Ávila se encuentra en la cuerda floja por haber ordenado la clausura del edificio de El Alear, pese a que este proyecto contaba con una suspensión judicial.