Mientras los dirigentes y las cúpulas de los Comités Ejecutivos Nacionales de los partidos políticos tienen sueldazos, los puestos de menor nivel carecen hasta de seguridad social.
Los partidos políticos tienen una megadeuda con el fisco de 626 millones de pesos. No pagan al Infonavit, al SAT ni al IMSS los impuestos de los trabajadores, pues retienen el dinero para utilizarlo en otra cosa, sin importarles la afectación a las entidades del Estado.